Semanas después de su salida de prisión provisional, y de ser absuelto del presunto delito de tráfico de drogas por el que la Fiscalía le pedía 9 años de cárcel, Rafael Amargo ha vivido uno de los días más emocionantes de su vida. Dejando atrás la «pesadilla» vivida los últimos 4 años, el bailaor se convierte en el primer artista flamenco con estrella en el Paseo de la Fama de las Vegas, siendo el cuarto español en recibir este reconocimiento tras Julio Iglesias, Mocedades y Camilo Sesto.
Emocionadísimo, el artista ha ofrecido una rueda de prensa arropado por su mujer Luciana Bongianino y por sus padres, en la que ha revelado los nuevos y sorprendentes proyectos con los que confirma que está de vuelta y que quiere pasar página tras los momentos tan duros en los que pensó que no conseguiría salir adelante.
Además de un ‘late night’ que podría emitirse en Ocho televisión -aunque todavía está negociando las condiciones- Amargo ha anunciado su debut como director teatral en una función protagonizada por su esposa y por Josele Román. «Luciana ha estado 4 años pendiente de mí y de cuidarme con todo este drama y se había olvidado que también es actriz y este es un premio porque merece sentirse realizada. Va sobre la gran Electra de Sófocles y lo estrenamos el 28 de junio en el Teatro La Encina» ha contado feliz por esta deseada vuelta al trabajo tras sus problemas legales.
«Estaremos ahí hasta que ahora la obra aguante, porque lo que queremos que sea una obra con continuidad, y tengo otra propuesta de una compañía importante de teatro que me ha llamado para dirigir, pero primero quiero que se estrene ésta y salga bien, porque estoy muy, muy vulnerable todavía. Con todo lo que me ha pasado, estoy ahora despertando porque metido en la vorágine no me he dado cuenta» reconoce, confesando que no ha sido fácil lo que ha pasado en los últimos tiempos.
Como desvela, en su mente está «terminar su carrera» como bailaor con un espectáculo en la Gran Vía madrileña para cumplir el sueño de su padre: «Lo tendré que hacer por él porque por mí ya me conformo con mucho menos, lo de la ambición se me frenó mucho». «Poco a poco iré saliendo y me reciclaré de coreógrafo o bailaor a acuante. Creo que como actor tengo una carrera muy grande por delante» adelantando que tiene una vis cómica que nos dejará sin palabras.
No oculta que la herida por su detención y la acusación de tráfico de drogas está todavía sangrante. «Las primeras lágrimas que me salen en 4 años han sido aquí. No he llorado, todavía no he roto. Como que no me lo creo, a lo mejor lo que tenía que hacer es llorar mar y sanar, sacarlo todo fuera. Tengo que asumirlo como un capítulo más de mi vida. Ni tengo que pedir perdón, ni tampoco tengo que dar las gracias» asegura, feliz porque su suerte empieza a cambiar y le han comunicado que el día 12 de octubre, Día de la Hispanidad, desfilará en Nueva York como uno de los hispanos del año.
En mente, tomar medidas contra los que le acusaron de ser un ‘narcotraficante’: «Quiero reclamar lo que tenía firmado y no he podido hacer. Una película en Bollywood que hubiera sido la entrada triunfal en Oriente medio, en el mercado ese que ningún actor lo ha conquistado. El contrato del Festival de Estambul que se quedó la gente con la entrada comprada, eso también tienen que pagármelo, esas cosas son las que voy a denunciar. A lo mejor no puedo denunciar los días que he estado en la cárcel son por otro delito, porque yo no fui a firmar, es una imprudencia mía. Lo que no sabemos es si esa imprudencia de firmar viene por el tema de que soy inocente, creo que son 160 euros por cada día de cárcel, hay un dinero también he estado 156 días en la cárcel. Y estamos mirándolo con mi abogado. He sufrido mucho» se lamenta.
Como nos cuenta, los meses que pasado en prisión le han servido para dejar atrás sus adicciones. «Allí no hay móvil, el teléfono no suena, el reloj se para y solo hay que hacer lo que tengas en la mente, tienes que tener una fuerza mental increíble. Me ha venido bien, claro que sí, me he hecho más fuerte, he escrito un libro que se llama ‘El hijo de la Macorina’, es un libro de ficción, no es de mi vida ni nada, ya lo tiene una editorial muy chula. También he pintado mucho. He hecho muchas cosas» afirma orgulloso de haber salido de la cárcel con una mejor versión de sí mismo.
Y empezar de cero es su objetivo ahora, aunque confiesa que no está siendo fácil porque ya no es el mismo: «Es el segundo tiempo del partido de mi vida, pero con un hombre que tiene luces y sombras. Tengo que intentar que nada más se queden las luces, las sombras ya las ha demostrado un juez, las luces tengo que volver a subirme a un escenario, no puedo de momento, no me deja el cuerpo, el otro día lo intenté sin que nadie se enterara, todo el mundo ilusionado de que había ido, me presentaron y me bajé, no sabía bailar».
«Tengo 49 años, es una edad muy difícil para la danza, ya no tengo el cuerpo joven ni tampoco la ilusión, eso es lo peor. No me quiero ver un tablado bailando para cuatro turistas. Ahora si me siento en una televisión gano en una entrevista para estar un año parado, para qué voy a prostituir mi arte, cuento mi vida y gano un dinero» reconoce.
Como desvela, le gustaría que le ofreciesen algún proyecto en televisión, como un reality para que le veamos «reír, llorar, cantar, ese Rafael Amargo que como persona no lo conocen. ‘Supervivientes’, también estaría muy gracioso en ‘Mastere’chef’, te puedes mear de risas conmigo. O ‘Bailando con las estrellas’ que lo he hecho en Italia, Francia y México y en España no me han llamado».
Y, a pesar de que Tamara Falcó le cae muy bien, tiene claro que lo haría mejor que ella como jurado de ‘Got Talent’: «Un poquito más sabré de entretenimiento, está muy bien que seas dicharachera, divina, es para quererla. Pero ese señor que está haciendo un número qué ha hecho. Edurne era cantante* las personas que juzguen en un talent show tienen que saber de lo que hablan, si el artista que está en el escenario se revela y dice mentira, te deja desacreditada. Juzgando arte no la veo, el arte se valora desde el arte».
Por último, Rafa nos ha contado que no tiene relación con la madre de sus dos hijos, Yolanda Jiménez, porque algo «muy gordo» sucedió entre ellos. «Llevo razón para no hablarle, lo juro, es por cosas que sabremos algún día en la vida» asegura, admitiendo que a pesar de sus diferencias es una madraza y por eso le tiene «mucho aprecio y cariño».