En el programa ¡De Viernes! el periodista José Antonio León sorprendió a los presentes y a todos los espectadores cuando desveló que Julián Muñoz y Mayte Zaldívar habían vuelto a contraer matrimonio en el mes de enero en Marbella.
León mostró el certificado de que Julián Muñoz y Zaldívar habían contraído matrimonio ante notario el pasado mes de enero. El asunto se remonta a hace unos meses cuando Mayte Zaldívar estuvo en ¡De Viernes! y desmintió que su visita al notario fuera para este fin, incluso se llegó a decir que pudo ser para un testamento o una fe de vida.
Como es sabido, Julián Muñoz está gravemente enfermo desde que ingresó en la cárcel y se comenta que su enfermedad empeora con el tiempo. De hecho las últimas imágenes del exalcalde de Marbella son las de una persona demacrada y consumida y, como él mismo expresó, con un «cáncer galopante» que le hace pasar los días acompañado de sus hijas.
Este matrimonio tardío puede tener como fin gestionar la herencia de Julián Muñoz en el caso de que fallezca para que su mujer recupere aquello que Isabel Pantoja se llevó cuando fue pareja del expolítico.
La vida de Julián Muñoz y Mayte Zaldívar es una narrativa entrelazada de amor, política y escándalo que ha capturado la atención de España durante décadas. La pareja, cuya relación comenzó con promesas de estabilidad y amor, se vio envuelta en uno de los casos de corrupción más sonados del país.
Julián Muñoz, nacido el 24 de noviembre de 1948 en Ávila, se trasladó a Marbella en su juventud, donde empezó a trabajar como camarero. Poco a poco, se introdujo en la política local, siendo uno de los hombres de confianza del entonces alcalde Jesús Gil y Gil. En 1991, Muñoz se convirtió en concejal de Turismo del Ayuntamiento de Marbella, y su ascenso continuó hasta llegar a ser alcalde en 2002, tras la muerte de Gil.
Mayte Zaldívar, por su parte, nació en 1956 y se casó con Muñoz, acompañándolo durante su ascenso en la política marbellí. Juntos, formaron una pareja que parecía sólida y prometedora en la escena social y política de Marbella. Zaldívar se mantuvo a su lado, participando activamente en los eventos sociales de la élite local.
Sin embargo, la apariencia de estabilidad y éxito se desmoronó cuando estalló el Caso Malaya, una de las mayores tramas de corrupción urbanística en España. Este caso reveló una extensa red de sobornos, blanqueo de dinero y tráfico de influencias en el Ayuntamiento de Marbella. Julián Muñoz fue uno de los principales implicados y, en 2006, fue detenido y encarcelado por diversos delitos relacionados con la corrupción.
Mayte Zaldívar también se vio arrastrada por el escándalo. Aunque inicialmente no estuvo involucrada directamente en las decisiones políticas, se descubrió que había participado en el blanqueo de dinero, ocultando grandes sumas de dinero en efectivo en su casa. En 2013, fue condenada a dos años y medio de prisión por estos delitos.
La relación entre Julián Muñoz y Mayte Zaldívar no pudo resistir la presión del escándalo. En medio del torbellino legal y mediático, Muñoz inició una relación con la cantante Isabel Pantoja, lo que añadió un nuevo capítulo a la saga de su vida. La relación con Pantoja, otra figura prominente en la cultura española, atrajo aún más la atención de los medios, convirtiendo el drama en una historia nacional.
Isabel Pantoja también fue condenada en 2013 por blanqueo de capitales, lo que complicó aún más la vida de Muñoz. Esta relación amorosa y su posterior implicación en delitos financieros consolidaron la caída de Muñoz como figura pública, transformándolo de un político influyente en un protagonista de la prensa del corazón y los tribunales.
Julián Muñoz en la cárcel
Julián Muñoz ha pasado gran parte de la última década entre rejas y libertad condicional. Su estado de salud se ha deteriorado notablemente, y ha sido protagonista de varias entrevistas y apariciones públicas donde ha reflexionado sobre sus errores y la vorágine de corrupción que arruinó su vida y la de sus allegados.
Por su parte, Mayte Zaldívar, tras cumplir su condena, ha intentado reconstruir su vida lejos del foco mediático. Su experiencia en prisión y la caída en desgracia de su familia han sido temas recurrentes en entrevistas y programas de televisión, donde ha compartido su perspectiva sobre los hechos que llevaron a su condena y la de su exmarido.
La historia de Julián Muñoz y Mayte Zaldívar es un recordatorio de cómo el poder y la ambición pueden corromper incluso las relaciones más sólidas. La corrupción desenfrenada en Marbella y las posteriores condenas judiciales de muchos de sus protagonistas dejaron una marca imborrable en la política y la sociedad española.
Este caso no solo destapó la magnitud de la corrupción en el municipio costero, sino que también demostró cómo las vidas personales y profesionales pueden entrelazarse de manera destructiva cuando se cede a la tentación del poder y el dinero fácil.
La saga de Julián Muñoz y Mayte Zaldívar es una compleja telaraña de amor, traición y escándalo que sigue resonando en la memoria colectiva de España, sirviendo como una lección dura pero necesaria sobre las consecuencias de la corrupción.