Ni una sonrisa hemos visto en Antonio Tejado desde que salió en libertad provisional este lunes tras 98 días en prisión por su presunta implicación en el robo a la vivienda de su tía María del Monte. Serio e incluso parece que enfadado, el ex de Chayo Mohedano intenta recuperar poco a poco la normalidad y adaptarse a sus nuevas rutinas con el apoyo incondicional de sus familiares más cercanos y de su novia, Samara Terrón. Y en estos tres días le hemos visto disfrutando de una comida familiar en un conocido restaurante sevillano nada más abandonar la cárcel de Sevilla 1, yendo a firmar a los juzgados -tiene la obligación de comparecer ante el juez los días 7 y 21 de cada mes-, de compras en unos grandes almacenes o incluso lavando su motocicleta.
Diferentes apariciones en las que no ha pronunciado ni una sola palabra, ignorando todas y cada una de las preguntas de la prensa que sigue cada uno de sus pasos desde que obtuvo la libertad condicional. Aunque se especuló con que Tejado estaría planteándose romper su silencio vía exclusiva previo pago de una importante cantidad económica, su abogado le habría recomendado que no hable, puesto que lo único que podrían conseguir sus declaraciones sería perjudicarle de cara al juicio, cuya fecha se desconoce por el momento porque todavía no ha terminado la fase de instrucción.
Sin embargo, y a pesar de su actitud esquiva -y en momentos parece que desafiante ante las cámaras- su entorno desliza que está «derruido» y «absolutamente devastado» tras su paso por prisión. Y como ha revelado la periodista Isabel Rábago, la máxima preocupación de su familia ahora mismo es intentar recuperar al Antonio que perdieron hace 3 meses cuando fue detenido.
Al parecer, en estas primeras 3 noches en libertad, le está costando mucho conciliar el sueño. Pasa gran parte del día con su madre en la casa que María José García posee en el centro de Sevilla, pero por la noche regresa al piso que tiene alquilado cerca del domicilio familiar para dormir con su novia, Samara, su gran pilar en estos momentos.
Entre sus planes más inmediatos, como ha contado Kike Calleja en ‘VAV’ está volver al gimnasio -claro está, no al de boxeo regentado por ‘El Ruso’, presunto cabecilla de la banda que asaltó la vivienda de María del Monte- y retomar sus estudios para opositar a Guardia Forestal, que ‘aparcó’ tras su entrada en la cárcel.
Informaciones a las que Antonio ha hecho oídos sordos a su llegada a casa en su motocicleta. El sobrino de la artista ha tenido que esperar varios segundos a que se abriese la puerta del garaje y, muy serio y con la mirada al frente, se ha limitado a quitarse el casco y tocarse la cabeza y el pelo con gesto nervioso, dejando en el aire cómo se encuentra y cómo están siendo sus primeros días en libertad.