Alba Carrillo no olvida a Feliciano López
Alba Carrillo tiene mucha gracia cuando habla de su ex-pareja Feliciano López, más que una mujer despechada parece una mujer con mucho sentido del humor y un pasado con poco tino para los hombres, pero estamos deseando que encuentre los trapos sucios que no lavaba el tenista, por lo visto las tareas del hogar no eran su fuerte, ir a hacer recados, tampoco.
La colaboradora alucina con el nuevo cargo que tiene Feliciano, está asombrada de que pueda gestionar la Caja Mágica, dice que no sabía ni gestionar la nevera, la modelo debería participar en el club de la comedia porque tiene mucha gracia hasta haciendo comparaciones, dice que Feliciano López no distinguía un lomo de un salchichón.
Alba Carrillo sorprendida con el puesto de Feliciano
La modelo está realmente conmovida con el nuevo cargo del tenista, no puede creer que haya llegado tan lejos, esta vez ha tocado techo en el mundo deportivo y se ha podido ver al jugador como nuevo gestor de La Caja Mágica, ella dice le dan cualquier puesto en la administración y que él lo lleva con orgullo y con honor.
Alfonso Arús ha puesto estos zascas de la colaboradora en su programa, le hacen tanta gracia como a nosotros, es decir, bastante, ella asegura que no hacía nada en casa, pero que tenía un toc: doblar camisetas, esa era su única habilidad recurrente en las tareas domésticas, poca cosa si tenemos en cuenta que debía sobrarle bastante tiempo entre entrenamiento y entrenamiento.
Alba Carrillo admira a la mujer de Feliciano
Para la modelo es admirable que la mujer del tenista lleve tanto tiempo con él, le desea todo lo mejor, dice que le cae muy bien por aguantarle tanto tiempo, parece que no le guarda tanto rencor al tenista como en el pasado, ahora toca seguir disfrutando de la vida, a veces a las mujeres siempre se les presupone que deben encontrar el amor, pero los refranes son sabios y la soledad es mejor que las malas compañías.
Alba Carrillo sigue con su sentido del humor compartiendo esos momentos divertidos con sus seguidores, también tendrá muchos detractores, entre los que seguramente se encuentre Feliciano López, no creemos que vaya a nombrarla jamás, aunque debería reconocer el arte con el que recuerda esos momentos «mágicos» de convivencia, como dicen las abuelas: si no fuera por estos ratitos.