Demostrando que su historia de amor se consolida a pasos agigantados, y que lo único que han hecho las polémicas que les han rodeado desde que salió a la luz su romance es unirles todavía más, Alejandra Rubio y Carlo Constanzia ya han disfrutado de su primera escapada romántica en pareja.
Aunque el hijo de Mar Flores está cumpliendo condena por un presunto delito de estafa agravada y no puede salir de la Comunidad de Madrid, no dudó en pedir un permiso especial para poder viajar con su novia -¿ya la podemos llamar así?- a Málaga para huir de la presión mediática que les ha rodeado en las últimas semanas y dar rienda suelta a su amor en la ciudad en la que Alejandra ha pasado gran parte de su vida.
Terelu Campos no se ha manifestado sobre la relación que su hija mantiene con el protagonista de ‘Toy Boy’, pero el hecho de que se alojasen en la casa que María Teresa Campos dejó en herencia a sus hijas en su paraíso andaluz, deja entrever que la colaboradora de televisión da la bendición a la joven pareja.
Un fin de semana en el que Alejandra y Carlo han aprovechado para conocerse más a fondo y disfrutar de largos paseos a la orilla del mar, presumiendo de una química y una complicidad innegables a pesar de que -conscientes de la presencia de fotógrafos siguiendo todos sus pasos- evitaron los besos, abrazos y caricias que sí hemos visto en algunas de sus citas.
Vestidos con ropa deportiva, la tertuliana y su chico dieron un íntimo paseo en el que de lo más sonrientes jugaron con la mascota del actor, una perra llamada Mía con la que Alejandra se lleva a las mil maravillas, lanzándole juguetes y diferentes objetos mientras Carlo observaba la escena encantado.
A pesar de que intentan sobrellevar la expectación mediática de la mejor manera posible, el hijo de Mar Flores -con una capucha para intentar pasar desapercibido- recriminaba con un gesto de enfado a la prensa su presencia a las puertas de la casa de María Teresa Campos, pidiendo a los fotógrafos un poco de tranquilidad para disfrutar de su primera escapada romántica con Alejandra.