Mónica Martín Luque, destrozada, rompe a llorar al hablar de la muerte de su exmarido Fernando Gómez-Acebo

Devastada. No hay otra palabra para definir a Mónica Martín Luque tras la muerte el pasado 1 de marzo de su exmarido Fernando Gómez-Acebo. La empresaria, que mantenía una maravillosa relación con el hijo menor de la infanta Pilar, ha retomado sus compromisos laborales tras el que confiesa que ha sido el fin de semana más triste de su vida, y no ha podido evitar romperse en plena calle al recordar al hombre con el que estuvo casada entre 2004 y 2011.

«Es el día más triste de mi vida, te lo juro. Estoy destruida» ha asegurado deshecha en lágrimas ante las cámaras, incapaz de articular palabra tras la muerte del sobrino del Rey Juan Carlos, que fallecía a causa de una grave insuficiencia respiratoria a los 49 años tras un largo ingreso hospitalario en el que habría sido sometido incluso a una traqueotomía.

Muy discreta, Mónica ha evitado revelar ningún detalle sobre su encuentro en el tanatorio de Fernando con los Reyes Felipe y Letizia, ni pronunciarse sobre la llamativa ausencia del Emérito, que a pesar de la estrecha relación que tenía con el hijo menor de su hermana no pudo viajar a España para darle su último adiós. «Es que no te puedo contestar, es que no me sale, no me salen las palabras» ha reconocido entre sollozos, completamente destrozada por el durísimo golpe que ha supuesto el fallecimiento del que confiesa que fue el hombre de su vida.