Mariano Rajoy, tras su retirada de la primera línea política en 2018, ha encontrado una etapa de serenidad que contrasta con sus años al frente del Partido Popular.
La moción de censura del PSOE precipitó su paso al lado, permitiéndole redirigir por completo sus prioridades. Aunque mantiene ciertos vínculos con la política y participa en eventos relacionados con la formación, ahora dispone de más tiempo para disfrutar en compañía de su familia.
El expresidente del Gobierno lleva cinco años dedicándose a disfrutar de placeres antes limitados. Recientemente, se le vio compartiendo momentos con sus hijos, una actividad que se ha convertido en una de sus preferidas.
En vísperas de Reyes, Rajoy jugaba a las cartas y compartía un momento distendido con su familia en la tercera planta del Club Náutico de Sangenjo, durante una de sus habituales escapadas a su Galicia natal. Cuando busca aire fresco y desconexión, no duda en pasar días en la costa que lo vio nacer, eligiendo en esta ocasión la Ría de Pontevedra.
Aunque su residencia principal se encuentra en Madrid, específicamente en el barrio de Aravaca, donde posee un dúplex de 280 metros cuadrados con un extenso jardín, Rajoy encuentra la paz necesaria en su día a día. Este barrio residencial ha sido hogar de figuras como María Teresa Campos o su hija Terelu.
En esta zona de Madrid se le vio hacer deporte en plena pandemia cuando la locura de los confinamientos y los horarios convirtieron a los españoles en espías de sus propios vecinos. Las sanciones que pidió por aquel entonces el PSOE para Rajoy no llegaron a más que a amonestaciones verbales dada la complicada situación que vivía España.
1Rajoy, registrador de la propiedad
Desde su retirada de la política activa, Mariano Rajoy retomó su profesión original como registrador de la propiedad. Esa fue su profesión desde que aprobara las oposiciones como uno de los mejores de su promoción y empezara a trabajar para el estado antes de prosperar en la carrera política hasta llegar a ocupar la Moncloa durante varios años.
Inicialmente destinado a Santa Pola, finalmente logró trasladarse a Madrid, concretamente a la Oficina del Registro Mercantil ubicada en el Paseo de la Castellana. Se estima que se jubilará de forma definitiva en el año 2025. En esa fecha empezará a cobrar su pensión además de la paga que le corresponde por haber ejercido como presidente del Gobierno, dinero vitalicio que seguirá percibiendo hasta el el final de su vida por los servicios prestados a España.
Entre los pasatiempos del exlíder del PP, destaca su interés compartido con sus hijos en el fútbol y, en concreto, en uno de los estadios y con uno de los equipos con los que más ha disfrutado desde hace años.
Si bien ya no lo practica, sigue siendo un ferviente seguidor del Real Madrid, disfrutando de los partidos ya sea por televisión o en el estadio cuando tiene la oportunidad. Además, ha probado en otras disciplinas como el senderismo por la montaña y el running, que, además de ese proble a durante la pandemia, le ha servido para evadirse de sus responsabilidades a primeras horas de la mañana cuando se le podía ver hacer deporte bien en el gimnasio del hotel o en las inmediaciones de su lugar de hospedaje acompañados por sus guardaespaldas.
La vida de Rajoy es muy diferente a la de aquel que ocupó su cargo en junio de 2019 cuando una moción de censura acabó con el gobierno del PP en España. Rajoy, el registrador, ahora ve los toros desde la barrera.
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