A principios de julio pasado, Alba Carrillo adoptó la decidida postura de presentar demandas contra diversas empresas vinculadas a Mediaset España y varias productoras, entre ellas la de Ana Rosa Quintana, Unicorn Content, y Sálvame, La Fábrica de la Tele, alegando «fraude de ley»‘ y «despido improcedente».
Esta determinación surgió después de que Mediaset España prescindiera de sus servicios como colaboradora en diversos espacios de la cadena. Es relevante recordar que la exmodelo fue protagonista de un culebrón mediático meses antes, cuando se reveló que durante la cena de Navidad de la empresa, mantuvo un romance con su compañero de televisión Jorge Pérez, ganador de Supervivientes 2020.
El grupo de comunicación justificó la terminación de su contrato con la versión oficial de que la nueva directiva optó por romper los lazos con la modelo debido a que «no quieren un perfil como el suyo. Quieren huir de las polémicas».
Desde entonces, la excolaboradora ha utilizado sus plataformas de redes sociales para criticar con dureza a sus antiguos jefes. «Estoy esperando un juicio por mis condiciones de trabajo. Porque para limpiar una cadena, no basta con despedir a las personas o vetarlas.
Hay que limpiar desde arriba, así se limpia una cadena», declaró poco después de su despido. «Nos habéis echado, no me han renovado un contrato, que ya veremos porque nos vamos a ver en los tribunales, y la que no quiere volver ahí ni muerta soy yo», concluyó.
Recientemente, se ha revelado que la modelo ha alcanzado un acuerdo para evitar llegar a los tribunales. A pesar de que se programó una audiencia para el 21 de diciembre en el Juzgado de lo Social número 39 de Madrid, tanto la demandante como las empresas involucradas llegaron a un acuerdo amistoso para eludir el juicio.
Este pacto implica una compensación económica significativa «con cuatro ceros» y un acuerdo de confidencialidad para prevenir la divulgación de detalles. Con todo esto, las empresas del grupo de comunicación italiano han logrado que la modelo Alba Carrillo retire sus demandas por despido improcedente y contratación fraudulenta.
1Alba Carrillo y su vuelta a Telecinco
En su revelador libro Lista para la Vida, Alba Carrillo ha dirigido críticas contundentes hacia el conglomerado mediático. Este testimonio se traduce en extensas secciones dedicadas a exponer su vulnerabilidad como nunca antes, detallando los episodios que han dejado una huella indeleble en su existencia. A pesar de su incansable empeño por evidenciar la injusticia que ha experimentado, ha decidido tomar un respiro en su travesía y ha ventilado públicamente la única razón que podría inducirla a regresar a los dominios de Mediaset.
Mediante su cuenta de Instagram, Alba Carrillo ha orquestado un elocuente alegato en favor de Marta Castro, una de las nominadas en ‘GH VIP’. Simultáneamente, ha justificado ciertas actitudes de la exesposa de Fonsi Nieto: «Vivir bajo el escrutinio constante de una cámara las 24 horas del día… Quienes hemos participado en un reality hemos expresado palabras indebidas o hemos sido malinterpretados en algún momento… Si nos filmaran las 24 horas del día, ninguno superaría la prueba del algodón… No sean injustos. Somos seres humanos, cometemos errores». Además, ha argumentado la necesidad de permanecer en el formato por una semana adicional, ya que «necesita ganar mucho dinero para su hijo».
En un giro revelador, Alba Carrillo ha desvelado la única condición que la llevaría de vuelta a Telecinco: si Marta Castro llega a la final del programa, promete manifestarse frente a las puertas de Mediaset con una pancarta.
«Si no me expulsan, me quedaré como público para darle un abrazo. ¡Observen hasta dónde puedo llegar!». No contenta con eso, ha dirigido una solicitud a los seguidores de Adara Molinero, quienes lideran una campaña en contra de la concursante debido a su relación con Rodrigo Fuertes, expareja de la exconcursante de ‘Supervivientes’: «No tiene ningún problema con ella; la comprende como cualquier madre que ha tenido que participar en un reality para trabajar. No creen conflictos donde no existen guerras».