Después de las imágenes que protagonizó el pasado viernes asegurando a la prensa que se encontraba fatal porque la situación le había pasado factura, Gabriela Guillén salía este sábado junto a su madre y su recién nacido a dar un paseo por las inmediaciones de su casa. Más tranquila, la fisioterapeuta atendió a los medios y dejó claro que no quiere saber nada de Bertín Osborne.
Gabriela pedía de manera tajante que no le hablen de Bertín porque no quiere saber absolutamente nada de él: «si queréis que os conteste, no me habléis de esta persona» y guardaba silencio cuando se le preguntaba sobre si llevará a cabo la prueba de paternidad entre el pequeño y el cantante.
En cuanto al comportamiento de su madre el pasado viernes, Gabriela la justificaba asegurando que fue debido a la presión mediática: «Os he pedido, por favor, ayer también. O sea, salió ella y muy nerviosa… ha pasado lo que ha pasado» y comentaba que está agradecida «a todos vosotros porque hacéis vuestro trabajo, pero lo que no voy a permitir es acoso a mi madre y a mi familia».
Además, Gabriela confirmaba que el parto fue superduro: «Sí» y desvelaba que ahora lo único que necesita es «estar tranquila» y alejada de todas las polémicas que se han creado en torno al nacimiento de su bebé.
Aunque tiene problemas para dormir, nos explicaba que su hijo es lo mejor de su vida y eso le alegra: «Sí, es lo único bueno que tengo… No, no duermo. Ya veis la cara, la cara que me veis» y aprovechaba para aclarar que «estoy muy bien, estoy dentro de todo este follón, estoy bien».