El torero Manuel Escribano, compañero de Juan Ortega, reacciona a su ‘espantá’ en su boda con Carmen Otte

El torero Juan Ortega se ha convertido, con su ‘espantá’ media hora antes de su boda con Carmen Otte este sábado en Jerez de la Frontera, en el protagonista de la versión real de la película protagonizada por Julia Roberts, ‘Novia a la fuga’, y su decisión de plantar en el altar a su novia desde hace 10 años, en lo más comentado de los últimos días.

Mientras el diestro y la que iba a ser su mujer guardan silencio, su entorno ha revelado que Juan, al no estar seguro de sus sentimientos, habría llamado al sacerdote que iba a oficiar su boda y éste le habría aconsejado que si no tenía las cosas claras, lo mejor era que no se casase.

Algo que el sevillano habría comunidado a su prometida -que estaba maquillándose para ir a la iglesia a darle el ‘sí quiero’- por teléfono antes de abandonar Jerez en su propio coche para refugiarse en la casa que compartía con Carmen Otte en Sevilla, mientras ella, destrozada, continúa en la casa de sus padres en la ciudad gaditana.

Una sorprendente e inesperada decisión la de Juan Ortega de huir de su boda sobre la que ahora se pronuncia uno de sus compañeros de profesión, con el que mantiene una buena relación. Se trata de Manuel Escribano, que ha asistido a la presentación de la XII edición de ‘We Love Flamenco’ en Sevilla y no ha dudado en opinar que detrás de esta ‘espantá’ habrá razones que desconocemos.

«Yo no estaba invitado a la boda aunque somos compañeros, no lo sé pero sus motivos habrá tenido. También hay que echarle valor para hacer eso, ¿no? Yo no hubiese sido capaz» reconoce, convencido de que serán «cosas muy personales» de Juan Ortega que no tenemos «por qué entender».

«Sus motivos tendrá y Dios quiera que sea para bien para todos, que al final seguro que en un futuro sale a bien para los dos, tanto para él como para su pareja. Al final la felicidad de cada uno ¿no? Si lo que cada uno hace no conlleva la felicidad de todos pues es mejor pararse, apartarlo a un lado y seguir, ¿no? Que al final es como se consigue la estabilidad y la felicidad de alguien» ha concluido, imaginando que si su compañero ha anulado ‘in extremis’ su boda es porque no era feliz.