En el punto de mira después de que el programa ‘TardeAR’ asegurase que dos inspectores de Hacienda se habían presentado en su hotel de Sevilla antes de la gala de los Latin Grammy para comunicarle que la Justicia va a embargar sus bienes por su deuda impagada de 3 millones de euros en Miami, Alejandro Sanz ha dado un golpe sobre la mesa.
Y si hace unos días desmentía en redes sociales que se hubiese producido esta ‘visita’ de dos emisarios del fisco -«Les voy a ahorrar a muchos ridículos que sigan haciendo el ridículo. Nadie ha venido a buscarme a ningún sitio de ninguna agencia de ningún gobierno, de ningún tesoro, de ninguna división, de ningún juzgado de nada de nada. Respétense* infórmense. Y luego si les queda tiempo* vivan* Pelotudos» ha publicado en Twitter- ahora es su equipo de trabajo el que ha desmentido que el artista haya sido declarado «en rebeldía» como se publicó hace varias semanas en gran parte de la prensa de nuestro país.
A través de un comunicado emitido este jueves, su agencia de representación ha dejado claro que Alejandro «nunca ha sido declarado en rebeldía» y que no existe «ninguna» decisión «judicial ni tributaria» que condene u obligue al cantante a «pagar cantidad alguna por ningún tipo de deuda, ni a embargarle ninguno de sus bienes».
«Las informaciones publicadas en los últimos meses afirmando que una sentencia judicial dictada por los Tribunales de Miami condenaba a nuestro representado a pagar tres millones de euros por una deuda hipotecaria y que, además, dicha sentencia se había ejecutado en España a través del Juzgado de Primera Instancia n.o 47 de Madrid, es falsa», sostiene la agencia Seitrack España.
En este sentido, señala que la sentencia que el fondo estadounidense pretendía ejecutar en España, «además de no ser firme, no condena a D. Alejandro Sánchez Pizarro por ninguna deuda ni por ninguna otra circunstancia».
Asimismo, añaden que el equipo legal del cantante ha presentado ante el Juzgado número 47 de Madrid un escrito de alegaciones frente a tales actuaciones. Posteriormente, el Juzgado decidió mediante auto firme de fecha 20 de noviembre de 2023, declarar «nula» su ejecución, «sin posibilidad de recurso alguno».
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