La socialité ha reaparecido en el funeral de Fernando Fernández Tapias con un nuevo look, luciendo una media melena mucho más corta de lo que nos tiene acostumbrados, y con la que se ha quitado diez años de un plumazo
Demostrando su apoyo incondicional a Nuria González -una de sus íntimas amigas- en su peor momento, Isabel Preysler ha sido uno de los rostros conocidos que han asistido este lunes al funeral en memoria de Fernando Fernández Tapias en Madrid.
Acostumbrada a acaparar todos los flashes en cada una de sus apariciones públicas, la socialité ha sorprendido con un cambio de look tan inesperado como favorecedor. Y es que después de varias décadas sin modificar su clásica melena castaña a la altura de los hombros, la madre de Tamara Falcó ha cortado por lo sano, modernizando su imagen y quitándose diez años -incluso veinte, porque aunque se conserva a las mil maravillas y aparenta mucha menos edad de la que tiene en febrero cumplirá 73 años- de un plumazo.
Sumándose a una de las tendencias beauty del momento, Isabel luce ahora un ‘blunt cut’: un corte de pelo estilo bob ligeramente asimétrico -algo más largo por delante que por detras-, que destaca sus suaves facciones y es tan estiloso como rejuvenecedor, además de cómodo y muy fácil de peinar.
Sin duda, un acierto total para la ‘reina de corazones’, que a punto de cumplirse un año de su ruptura con Mario Vargas Llosa, está disfrutando de su soltería y no tiene en mente volver a enamorarse.