El día de ayer fue uno de los más importantes en la vida de la Princesa Leonor y como tal, durante las primeras horas de la mañana la vimos algo nerviosa, pero lo cierto es que según iban sucediendo todos los actos de manera exitosa, se iba relajando.
Tras jurar la bandera y disfrutar del almuerzo con diversas personalidades institucionales, la Familia Real regresaba al Palacio de la Zarzuela y, atención, porque las imágenes hablan por sí solas.
Mientras vemos una gran sonrisa en el rostro de la Princesa Leonor, su madre, Doña Letizia, destacaba por la seriedad. Tanto es así que ni siquiera levantó la mirada de lo que podría ser su teléfono móvil cuando se disponía a entrar en la Zarzuela. Además, podemos ver que no había ninguna conversación con el Rey Felipe VI.
Aunque se ha especulado sobre los motivos que podrían haber causado este supuesto malestar en la Reina Letizia, parece que a lo largo del día se disipó… ya que cuando acudió y, posteriormente, abandonó el Palacio de El Pardo conduciendo ella misa el vehículo, mostraba una sonrisa de oreja a oreja.
En estas imágenes podemos ver también la gran complicidad entre las hermanas, la Infanta Sofía y la Princesa Leonor, que cuando entraban en la Zarzuela lo hacían con una sonrisa, sin dejar de saludar a todas las personas que veían por el camino y, lo más importante de todo, con una sonrisa en su rostro.