Joaquín Sánchez entrevistó el jueves en su programa ‘El Novato’ a la que ya podría se le podría empezar a otorgar el título de reina de las tardes. Y sobre este asunto, por cierto, habló Sonsoles Ónega con el jugador de fútbol y ahora presentador. Pero de una reina real. La periodista estuvo a punto de desvelar de cómo se enteró de que su amiga, la ahora reina Letizia, comenzaba una relación sentimental con el por aquel entonces príncipe Felipe, además de abordar cuestiones como la fama o el estrés que, como presentadora, ha sufrido en televisión.
Ella y Letizia, amigas desde hace años
«No me acuerdo, hace muchos años de esos. Madre mía, no sé sería algo así como me he enamorado de un bombero porque se parece un poco el Rey a un bombero, apagando fuegos todo el día», contó la presentadora de ‘Y ahora Sonsoles’. Y, para desviar un poco el foco de atención tan jugoso de su relación de amista con la Reina Letizia, la hija de Fernando Onega compartió con el público una divertida anécdota que tenía que ver con Casa Real y que, aunque ella no estuvo presente, le da absoluta credibilidad: «Poco después de que se conociera el compromiso del rey Felipe con la reina Letizia, fue la reina Sofía a un acto y todas las periodistas allí y le dice una ‘ay, doña Sofía, no sabíamos que el Príncipe buscaba en el gremio, de haberlo sabido nos habríamos arreglado más’, explicó entre risas. «Para toda la profesión fue como un shock, que una periodista enamore al Príncipe de Asturias de entonces, eso fue un terremoto brutal».
Aunque la también escritora de novela no quiso hablar demasiado del tema, sí que se atrevió a decir que la reina consorte «no ha cambiado nada y es una buena amiga», de lo que Joaquín bromeó asegurando que, lo que le tenía que transmitir la próxima vez que hablara con ella es que viera ‘El Novato’.
¿Por qué Sonsoles lloraba todas las noches?
La mayor parte de la entrevista, centrada en un recorrido por su biografía personal y trayectoria profesional, Sonsoles confesó por primera vez ante las cámaras que hubo un momento, durante su trabajo en Telecinco, en el que lloraba desconsoladamente en casa cada noche. La razón de la gran angustia que la comunicadora ha desvelado, tan grande que no le permitía disfrutar cuando se iba a casa después de hacer su trabajo, se remonta a la etapa de cambios en la que dejó de ser reportera para subir de nivel y ser presentadora. Tras muchos años como corresponsal de Informativos Telecinco en el Congreso de los Diputados, a Ónega le ofrecieron ponerse al frente de ‘Ya es mediodía’. Un cambio no supo gestionar del todo bien por la gran presión que sintió en esos momentos.
Sobre este doloroso tema, Sonsoles Ónega sí que quiso sincerarse y confesar todo el sufrimiento que vivió en dicha época en Mediaset. «Era enfrentarme a lo desconocido. Eso me daba mucho miedo. Aquello fue un momento clave en mi carrera. Evidentemente, yo sabía que tenía que coger ese tren, pero no sabía si iba a estar a la altura. En el verano de 2018 era de llorar todas las noches. Yo me metía en la cama y me preguntaba ‘¿Pero qué necesidad?”.
La presentadora del programa vespertino de Antena 3 que también lleva su nombre explicó que esa sensación de angustia le venía porque «yo sabía hacer mis crónicas, mis 25 segundos para Pedro Piqueras, y el oficio que implica ser reportero, pero el plató tiene otras reglas. Además, Sonsoles ha reconocido que cuando comenzó con ‘Ya es mediodía’, fue conocedora de la presión que supone el implacable share de audiencias en este sentido. «Sientes que es tu responsabilidad y que si no hay un buen dato es por tu culpa”, comentó al respecto.
Y, también, la presentadora quiso que el público supiera cómo el presentar un programa diario afecta bastante a los hijos. De sus dos descendientes, la presentadora dijo que «son maravillosos y me padecen. Soy también una madre pesada e intensa. Llevan con resignación el llegar tarde. Pero ya se habían criado con una madre que llegaba siempre tarde».
Pero Sonsoles, más allá de sus niños, reconoció que sabe que es muy difícil que familia ya amigos entiendan su trabajo. «El que está tu lado no siempre te sigue. Tiene que tener un puntito de locura o quererte mucho. Es complicado. Yo lo entiendo», explicó de una forma muy empática.