Carmen Lomana vivió este domingo el mayor susto de su vida. Dos encapuchados asaltaron su residencia en el madrileño barrio de Chamberí cuando ella se encontraba en el interior. Un atraco del que poco a poco vamos conociendo más detalles. Tal y como ha revelado la socialité, al ver a los ladrones, se encerró en una habitación y llamó a la seguridad de su edificio.
«Grité muy alto ¡’sinvergüenzas, la policía viene de camino! Estoy bien físicamente porque fui muy valiente. Me podrían haber dado una paliza tremenda y estaría ahora mismo en el hospital» ha contado a ‘Vanitatis’, reconociendo que fue un momento «horrible». «Estoy asustada y traumada» confiesa.
Horas después del asalto, y de que Carmen denunciase el asalto en comisaría, y de que un cerrajero de urgencia reparase la puerta de su casa, la socialité recibía en su domicilio la visita de dos agentes de Policía encargados de la investigación, de la que apenas ha trascendido nada y sobre la que la tertuliana prefiere no dar ningún detalle, dejando en el aire si los ladrones se llevaron algo de valor.
Lejos de quedarse ahí, la tertuliana ha decidido aumentar las medidas de seguridad y este lunes hemos visto a un empleado de una conocida empresa de seguridad accediendo a la vivienda para instalar una nueva alarma para evitar que se repita la pesadilla que vivió Lomana este domingo, blindando su residencia para que los ladrones se lo piensen mejor antes de volver a asaltar su propiedad.