Afortunadamente, cada vez existe más consciencia sobre la importancia de utilizar fotoprotección como medida indispensable para proteger la piel del sol. No solo se debe usar en verano, si bien es cierto que en invierno estamos menos horas expuestos y más protegidos (llevamos más ropa), la radiación UVA y UVB sigue incidiendo en nuestra piel y eso, a largo plazo, tiene consecuencias. Su uso ya forma parte de las rutinas de cuidado diario de nuestra piel. Te contamos por qué la protección es fundamental y cómo evitar los daños irreversibles del sol con las medidas adecuadas.
7Cómo debe ser un protector solar para evitar realmente las manchas
Un fotoprotector específico para las manchas debe contar, en primer lugar, con un sistema filtrante de amplio espectro, es decir, que sea capaz de proteger de las principales radiaciones que estimulan no solo la producción de melanina, sino también que no se realice de forma adecuada, indican los expertos. El factor de protección tiene que ser muy alto, tanto en UVB (50+), como en UVA. Y puede ser interesante añadir pigmentos que aporten un toque de color al producto, como son los óxidos de hierro, porque algunas bandas de luz visible contribuyen a la pigmentación.