Tamara Falcó acudía en la tarde de ayer a la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, concretamente para el desfile de Pedro del Hierro, firma para la que la Marquesa de Griñón ha presentado sus creaciones. Acompañada por su prometido, Íñigo Onieva, ha dejado claro muchos aspectos de su vida que siguen todavía en el aire y ha hablado, por primera vez, de la ruptura sentimental de Mario Vargas Llosa y su madre, Isabel Preysler.
Después de anunciar su ruptura en la revista ¡HOLA! hace unas semanas con el escritor, todavía no hemos visto a Isabel Preysler, pero sí a su hija. Fue ayer tarde y lo cierto, queridos Cotillas, es que dejaba muy claro que lo que haga el escritor le es indiferente, tanto para ella como para su familia. La pregunta era muy esperada, ¿invitará a Mario Vargas Llosa a su boda? Tamara aclaraba que «al final Mario y mi madre han roto su relación» y, por lo tanto, «no tendría mucho sentido que yo invitara a Mario», pero lo que sí quiso matizar es que siempre se han llevado fenomenal y que le desea todo lo mejor.
La Marquesa de Griñón no sabe si el escritor peruano se pondrá en contacto con su madre para felicitarle por su cumpleaños el próximo sábado: «no lo sé, no tengo ni idea», pero lo cierto es que no parece que la reina de corazones necesite su felicitación. Su reconciliación con su exmujer Patricia Llosa y los comentarios que hizo en sus relatos sobre ella y su hija han provocado que ya no exista una posible reconquista.
En cuanto a la información que se publicó de que se había encontrado con Patricia en el mismo avión destino a París, Tamara dejaba claro que no fue ella: «no, fue mi hermana Xandra, que coincidió con Mario, yo no la vi». Eso sí, la hija de Carlos Falcó aseguraba que si este reencuentro llegara a producirse, no tendría inconveniente en saludarle: «al final somos gente educada, si la veo, la saludo sin problema».
Además, Tamara Falcó aclaraba que la defensa que hizo su madre tras el relato de Mario viene dada porque «cualquier cosa que digan de sus hijos lo sufre mucho más que lo que digan de ella, le duele especialmente». «Yo no le di ni la más mínima importancia. Mario es un artista y si me quiere mencionar, bienvenido sea, pero hombre…» concluía.
Aunque si algo nos quedaba claro, queridos Cotillas, es que Tamara Falcó está volcada en su enlace matrimonial con Íñigo Onieva y le da exactamente igual lo que el literato haga con su vida. Pero, para sorpresa de muchos, la Marquesa de Griñón se mostraba encantada con el hecho de que el Premio Nobel de Literatura hable de ella, puesto que se trata de un escritor prestigioso y que hable de ella en sus relatos le aporta todavía más repercusión mediática.
Isabelle Junot: responsable del cambio de fecha de la boda
>Por su parte, Isabelle Junot reaparecía radiante con un ajustado vestido negro de brillo con el que presumía de sus cinco meses de embarazo. Sin la compañía de su marido, Álvaro Falcó, la socialité hacía acto de presencia en la espectacular fiesta que la firma Bvlgari celebrada en el Museo Thyssen de Madrid. La prima política de Tamara Falcó se pronunciaba acerca de la que será la boda del año y confirmaba que ella es la ‘responsable’ de que la mediática pareja haya pospuesto tres semanas su enlace matrimonial.
La hija de Philippe Junot se convertirá en madre por primera vez a mediados del mes de junio y, por la especial relación que mantienen, la Marquesa de Griñón no ha dudado en atrasar el sí, quiero del 17 de junio al 8 de julio, asegurándose así que Isabelle Junot y su primo Álvaro Falcó puedan estar presentes en el día más importante de su vida.
A menos de cuatro meses para convertirse en mamá, la mujer de Álvaro Falcó ya ha confesado que esperan una niña; algo que reveló inconscientemente en redes sociales durante una cena con amigas. Eso sí, por el momento, Isabelle Junot prefiere no revelar el nombre elegido para la pequeña. «Ella es la joya de mi vida y, aunque cuando se acerque el momento tendré más miedo, es un proceso muy bonito y tengo mucha felicidad por ahora», confesaba.
Tamara Falcó se queda sola tras la estampida de Onieva
>Resulta evidente, queridos Cotillas, que Tamara Falcó vivió, en la tarde de ayer jueves, uno de los momentos más especiales de su trayectoria como embajadora de la firma Pedro del Hierro. Por primera vez, la hija de Isabel Preysler presentaba los diseños de su colección cápsula TFP para dicha marca en la pasarela de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid.
En lo que a Íñigo Onieva respecta, el empresario lograba dejar de lado su animadversión a las cámaras y decidía mostrarle su apoyo a Tamara Falcó en su debut. Un momento muy especial para ambos en el que posaban juntos, por primera vez, desde su reconciliación a finales del pasado año.
Aunque, muy atentos, queridos Cotillas, porque al verse desbordado por la presión mediática en la que fue su reaparición pública junto a Tamara Falcó, el empresario abandonaba de forma abrupta el desfile de Pedro del Hierro. Una comentadísima estampida a la que el propio Onieva le quiso quitar importancia horas más tarde. «Por mucho que insistáis jamás me agobiaréis lo suficiente», manifestaba el prometido de la Marquesa de Griñón ante los micrófonos de Europa Press.
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