Tamara Falcó e Íñigo Onieva son la pareja del momento, eso es indiscutible. Sin embargo, y a pesar de que ya han pasado unos días desde la tan sonada reconciliación, siguen siendo muchos los rumores sobre los posibles causantes de esta nueva explosión de amor. Con una declaración de amor que ha revolucionado las redes sociales -y el corazón de Tamara Falcó- tras su viaje al Polo Norte rodeados de perros de nieve y trineos, la Marquesa de Griñón y el empresario madrileño se preparan para dar el paso definitivo. En Cotilleo.es te contamos todos los detalles detrás de esta reconciliación.
En su vuelta a Madrid, hemos podido ver a un Íñigo Onieva de lo más reservado y contenido, que aseguraba no tener «nada que decir». Sin embargo, Tamara Falcó regresaba ayer a El Hormiguero y parece haber vuelto con las pilas cargadas de su viaje terapéutico, ya que no dejó espacio para la duda en lo que a su reconciliación respecta. Tal y como ella misma ha confesado, Julio Iglesias ha sido un punto decisivo a la hora de retomar la relación con Íñigo Onieva. Tan buena es la relación de la Marquesa con su madre, que no está dispuesta a decepcionarla de nuevo.
Tamara Falcó destapa a su madre en El Hormiguero
>En su primer día de ‘colegio’ tras las vacaciones navideñas más importantes de su vida, Tamara Falcó regresaba anoche a El Hormiguero para su tertulia semanal junto a Pablo Motos y el resto de colaboradores. Entre tantas conversaciones, la más comentada tras el programa es en la que la Marquesa de Griñón habla de una conversación con Isabel Preysler que habría provocado su reconciliación. Con una sonrisa de oreja a oreja, Tamara Falcó ha dejado ver lo enamorada que se encuentra de su pareja, así como los futuros planes de boda que ya se vieron truncados hace unos meses: «Si Dios quiere», confesaba ante el presentador.
Una de las historias de amor más mediáticas de la historia de la televisión como fue la de Isabel Preysler y Julio Iglesias, parece haber sido el empujón que Tamara Falcó necesitaba para darse cuenta de cuáles son sus prioridades en realidad. Siguiendo los consejos de su sacerdote de cabecera, Tamara Falcó terminó el año reflexionando acerca de las posibles formas de amar, aunque sin perder el contacto con Íñigo Onieva en ningún momento: «Dieciocho mensajes diarios». Y es que, han sido unas navidades complicadas tanto para la Reina de corazones como para la Mujer del Año 2022.
Unas duras declaraciones que Tamara Falcó presentaba ayer en El Hormiguero, dejando ver el lado más oscuro de su cena de Nochevieja, ya que en el momento de tomar las doce uvas «sale lo de mami y Mario» explica la Marquesa. Una cena de lo más atípica con Chabeli Iglesias al teléfono «desde Estados Unidos» en la última noche del año: «mi madre hizo un comentario sobre el tío Julio y yo pensé: Nunca se han dado una oportunidad y me dio qué pensar sobre el amor» comentó Tamara Falcó en referencia a la relación de Julio Iglesias con su madre.
Tamara Falcó fue quien dio el gran paso en su reconciliación
>Una separación sobre la que la diseñadora ha reflexionado mucho durante las últimas semanas, y que habrían llevado a Tamara Falcó a retomar su historia de amor con Íñigo Onieva. Tales fueron las confesiones de Isabel Preysler a Chabeli Iglesias en la última cena del año, que incluso Tamara cuenta cómo la Reina de corazones confesó en cierto momento que «enamorada es lo que estaba yo de tu padre, que me rompió el corazón y por eso no le pude perdonar», dejando claro que fueron las reiteradas deslealtades por parte de Julio Iglesias el detonante de la ruptura.
Tamara Falcó hizo ‘clic’ y esa misma noche escribió un mensaje a Íñigo Onieva, evitando seguir los pasos de su madre y renunciar a un amor tras varias deslealtades: «Me dio que pensar… Después me dio mucha pena. Le escribí un mensaje. Le dije: ¿Vas a venir a verme luego? Yo no sabía si sí, si no… Él cogió su moto y se vino» explicaba Tamara Falcó sonriente. La socialité parecía anoche dispuesta a narrar cada capítulo de su romance, y así lo hizo: «Hicimos las paces y ya tal… Nos queríamos quitar de todo este ruido y nos fuimos al Polo Norte. Pierdes algo y te das cuenta de lo que significaba en tu vida», terminaba confesando Tamara Falcó.
Como ya sabemos, Íñigo Onieva es un hombre incansable cuando se propone algo, y fue la misma Tamara Falcó quien aseguró que «él estaba erre que erre… Soy una mujer enamorada, he visto la posibilidad de cambio y allá que voy», confirmando lo que todos pensamos. ¿Se habrá ‘lanzado’ a una piscina vacía? Siempre consciente del riesgo, la Marquesa de Griñón garantiza que «la bofetada ha sido monumental» y aunque no sabemos si se refiere a una física o metafórica, también asume que «existe ese amor entre los dos. Veo posibilidad de cambio».
Isabel Preysler, que ya está curtida en mil batallas, aconsejó lo mejor que pudo a una Tamara Falcó algo menos experimentada. La socialité dejó más que claro que «la gente no cambia», en un intento de «evitarme el dolor» cuenta Tamara Falcó, quien además señala que ella cree que la gente cambia: «Yo pensé que tenía dos opciones. O ver que pasa o quedarme con la duda. Así que dije que voy a intentarlo. Y aquí que estoy». Con planes de boda, un exclusivo ático y mucha ilusión, la relación de Íñigo Onieva y Tamara Falcó se consolida. Mientras tanto, el empresario ignora las declaraciones de su suegra insistiendo en que «vamos a apostar todos por nuestro amor».