A muchos lo del bálsamo del tigre les sonará a chino, y, sin quererlo, habrán acertado, ya que se trata de una pomada de origen chino a base de ingredientes herbales. Si lo compras en ese país te lo venden como un producto que sirve para aliviar cualquier dolor. En España se comercializa como producto para masaje, aunque se te indica que también puede ser aplicado en casos de dolores musculares y de cabeza, migrañas, tos, chichones y hasta en picaduras de mosquitos. Vamos, para casi todo. Aquí vamos a ver las diferencias entre el blanco y el rojo.
Origen del bálsamo del tigre
El origen del bálsamo del tigre es muy antiguo, ya que se ha utilizado desde siempre por la medicina tradicional china. Se llama así por Aw Boon Haw, uno de los hijos de su creador, cuyo nombre significa «tigre amable». En su composición nunca hubo ningún producto relacionado con el animal, como muchos creen. Tal y como lo conocemos hoy en día, fue desarrollado a finales de 1870 en Rangoon, Birmania, por Aw Chu Kin, un herborista de la Corte del Emperador de China, que emigró a Rangoon y abrió una pequeña herboristería.
Dos tipos de bálsamo del tigre
El bálsamo del tigre está hecho de contrairritantes, los cuales causan sensaciones suaves de calor y frío en la piel con la idea de aliviar la sensación de dolor, aunque también produce una sensación de hormigueo. Al margen del nombre genérico, hay que distinguir entre el rojo y el. blanco. Se les ha dado una u otra denominación en función de la sensación que producen en el cuerpo al intentar aliviar el dolor. Así, el llamado rojo produce una sensación de calor en la zona, mientras que el blanco una sensación refrescante.
Ingredientes de cada tipo
Los dos tipos de bálsamo del tigre cuentan con diferentes ingredientes activos. Así, el blanco lleva mentol y salicilato de metilo, combinación que permite provocar esa sensación de enfriamiento que se siente al aplicarlo. El rojo combina el mentol con el alcanfor, con lo cual produce una sensación de calor en la zona del cuerpo dañada. Éste lleva además ingredientes no activos como aceite de Cajuput, aceite de canela chino y aceite de clavo. El que ambos lleven mentol se debe a que éste funciona como anestésico y promueve la contracción de los músculos.
Cuál es mejor
El mejor bálsamo de tigre será el que se adapte a las necesidades específicas de cada persona. Aunque ambos tienen mentol, en el blanco hay mayor cantidad, lo que hace que esa labor de contracción de los músculos sea más efectiva. Si se sufre de dolores de cabeza, migrañas congestión nasal, resfriados y hasta picaduras de insectos, la mejor opción es por tanto el blanco, mientras que si te duelen los músculos y articulaciones, es mejor el bálsamo de tigre rojo. Además, este posee propiedades bactericidas, antivirales, antisépticas y parasiticida.
Cuándo no debe usarse
El bálsamo del tigre no es un producto milagroso, ni vale para todo. Por ejemplo, este ungüento no debería aplicarse en heridas ni en pieles que han sufrido quemaduras, ni en partes irritadas, inflamadas o pieles secas, ni por supuesto para intentar solucionar dolores de oído, ojos y boca, partes en las que nunca debe darse. Tampoco es muy saludable ponérselo después de haber estado al menos 30 minutos expuesto a un calor excesivo, como puede ser cuando has disfrutado de una sauna. Y cuando se aplica es mejor ponerse poco y ver si hay reacciones.
Cómo aplicarlo
Ya sea bálsamo del tigre rojo o blanco, en lo que también ambos coinciden es en la forma en la que hay que aplicarlo sobre diferentes partes del cuerpo. Así, si es para un dolor muscular lo ideal es frotar suavemente en las partes donde se experimenta dolor hasta que sea absorbido por completo. Si lo que queremos aliviar con él es un dolor de cabeza, hay que frotar sobre la frente o las sienes y masajear ligeramente con movimientos circulares. En el caso de una gripe o congestión nasal, lo mejor es aplicarlo en el pecho y frente, frotando a ser posible suavemente.