Hay cosas que Chelo García-Cortés todavía no logra entender. Como que se haya convertido en todo un icono LGBTIQ+ sin haberlo pretendido nunca. O que después de vivir el amor de su vida junto a José Manuel Parada ahora lo esté haciendo junto a Marta Roca. La periodista y colaboradora de televisión ha dejado lo que es el testimonio de su legado plasmado en un libro titulado Sin etiquetas.
Chelo García-Cortés ha querido dejar por escrito toda una vida que en sus inicios estuvo marcada por la tragedia, la soledad y una madurez rápida, pero que ahora continua con el poder de ser una de las periodistas más reconocidas en el mundo de la crónica social y convertida en todo un icono de un colectivo del que ahora se siente más dentro que nunca. La colaboradora de televisión lanza mañana este relato a través de Plaza & Janés, un sello de Penguin Random House Grupo Editorial.
«Cuando solo tenía once años perdí a mi madre. Eso me convirtió en una mujer rebelde e independiente siendo todavía una niña, y me tocó enfrentarme a cosas a las que nadie debería
afrontar a esa edad. Mi infancia fue difícil, pero también viví una emocionante y trepidante juventud», recoge parte de la sinopsis de este recorrido por su vida. Un relato que Chelo García-Cortes ha querido dejar claro que es para contar su vida y «no la de los demás».
Chelo García-Cortés, una infancia marcada por la tragedia
>Chelo García-Cortés dice que dejó de ser una niña en el momento en el que le comunicaron que su madre se había suicidado. En ese instante, la vida de la periodista cambió para siempre y pese a que su madre había cometido el mayor pecado de cara a la Iglesia, el buen sueldo de su padre pudo conseguir que fuera enterrada en el cementerio de la Almudena. «Cuando eres hija de una suicida, te preguntas qué has hecho mal. Yo no responsabilizaba ni a mi padre ni a mi hermano, sino a mí misma, y supongo que a ellos les ocurría algo parecido», es el duro testimonio que recoge Chelo García-Cortés
Aun así, la periodista ha reconocido que es una etapa que ha podido cerrar y lo ha hecho en un momento no tan alejado de nuestros días actuales. Su participación en Supervivientes fue un paso que Chelo García-Cortés siempre quiso dar y fue precisamente en Honduras donde explica que pudo cerrar «esa herida en mi vida». Allí pudo «reconciliarse con su memoria» porque la soledad de la isla hizo que la periodista pudiera reflexionar sobre la vida que hasta en esos momentos, con 67 años y perdida en un reality, no pudo hacer.
José Manuel Parada, el periodista que cambió su vida
>En cierta forma, su vida también cambió cuando en Ourense apareció José Manuel Parada, un estudiante que llegó para revolucionar su día a día y el amor por su profesión. Desde entonces se convirtieron en la pareja periodística por excelencia que terminó enamorándose y decidieron crear su historia de amor en Barcelona. Fue en aquella ciudad condal moderna y llena de caras artísticas donde Parada y Chelo García-Cortés comenzaron su andadura por el mundo de la crónica social y la prensa rosa.
«En aquellos años, experimenté y viví el amor libre, pero con el tiempo me di cuenta de que yo prefiero la monogamia», recoge Chelo García-Cortés. Y, es que, ese momento de querer romper todos los esquemas terminó en parte con la relación que mantenía con Parada, ya que este descubrir que su modelo sentimental era el de tener una relación abierta. La periodista, a pesar de confesar el trío con un actor y el periodista, sabe que su sitio estaba en dar todo por y para una persona.
Una noche de amor con el mito erótico de aquellos tiempos
>Seguro, queridos Cotillas, que recordáis la frase viral que hoy recorre las redes sociales como la pólvora. «Tú y yo, Chelo y te quiero y siento mucho que no me hayan gustado las mujeres porque habría sido más feliz, hemos tenido una noche de amor», reconocía Bárbara Rey en un Deluxe. La baronesa reconoció algo que tanto Chelo García-Cortés como ella decidieron llevarse a la tumba, pero el polígrafo no pudo mentir. Desde ese momento, la historia que vivieron las dos cobró todo el sentido. Ahora, la periodista puede contar en estas memorias lo que de verdad vivió junto a Bárbara Rey.
Según ha contado la colaboradora de televisión fue en una nochevieja de 1979 cuando junto al hombre del trío, José Manuel Parada y Bárbara Rey, la chispa con esta última saltó. Sus memorias recogen que ocurrió de la forma más «inesperada como natural, sin alcohol ni necesidad de nada más allá que la propia chispa que se desató de repente, que se produjo un precioso encuentro sexual». Después de eso, Chelo y Bárbara unieron si cabe más sus vidas y desde entonces han estado juntos de todas las formas que pueden estar: «como amigas, como hermanas», decía Bárbara Rey en ese Deluxe.
Chelo García-Cortés icono LGTBIQ+
>Lo que ha conseguido ahora Chelo García-Cortés es convertirse en todo un icono LGTBIQ+. Y, es que, ahora que su mujer ha decidido convertirse en un personaje público y el hecho que supuso el testimonio de Bárbara Rey, ha hecho que la periodista sea todo un referente del colectivo. Chelo García-Cortés cuenta que no estaba entre sus planes ser icono de nada, así como nunca se ha posicionado en política. Pero, «ahora sé que es importante que me identifique abiertamente como mujer bisexual».
Chelo García-Cortés se ha dado cuenta así que estamos en un tiempo de nuevas generaciones y luchas. Y, aunque nunca podría pensar en que se pudiera convertir en una estrella reivindicativa de un colectivo ahora sí que ha llegado a entenderlo. «En los últimos años me he dado cuenta de algo muy importante: que realmente puedo ayudar en este sentido», ha reconocido en sus memorias, que a partir de mañana serán también de todos sus lectores.