Carmen Sevilla, uno de los grandes mitos del cine español, ha cumplido 92 años y en Cotilleo.es sabemos cómo ha sido la celebración. Luchando contra el alzheimer desde hace más de una década, la actriz – que ya no reconoce a su hijo Augusto Algueró, como él confesó recientemente – ha celebrado su cumpleaños en la intimidad en la residencia en la que reside a las afueras de la capital. Pero, ¿por qué hace tanto tiempo que no salen imágenes suyas?
Carmen Sevilla es un icono de España y su hijo no quiere que el público tenga un recuerdo de ella que no le hace justicia. Afortunadamente su estado de salud no es malo, simplemente padece una enfermedad que le afecta a la memoria, pero no tiene dolores. La actriz ha cambiado mucho su aspecto físico y su familia prefiere que no salga ninguna imagen para no deteriorar su reputación. Sin embargo, esto no sucederá nunca porque es una persona muy conocida y la sociedad está muy concienciada con el alzheimer.
De momento solamente sabemos que los médicos han encontrado la forma de hacer que Carmen se sienta cómoda. Su estado no ha empeorado, pero tampoco mejora porque estamos hablando de una enfermedad realmente delicada y sin cura.
Carmen Sevilla vive en una residencia en Madrid
>Hasta su residencia se ha acercado con un ramo de flores uno de sus mejores amigos, Moncho Ferrer, que muy emocionado ha revelado cómo ha visto a Carmen en un día tan especial: «Está estupenda, tranquila. La he dejado recién peinada, como dice la canción, escuchando ‘La bella de Cádiz'». «Ella necesita paciencia y tranquilidad. Sigue estando delicada de salud, pero en general, dentro de lo que es bien está bien, exactamente fantástica dentro de lo fantástica que se puede ver», ha asegurado. En Cotille.es sabemos qué ha contado exactamente, hemos tenido acceso a sus palabras.
«Vengo a verla casi todas las semanas y es maravillosa. Un osito de peluche. Es una persona que si no existiera habría que inventarla. Es generosa, cariñosa, buena, noble, una buena esposa, buena madre, buenísima amiga. Es muy difícil definirla» ha apuntado, confesando que para él «Carmen Sevilla significa todo. No hay más que una». «Nosotros nos conocimos dos años antes del musical ‘En directo’. Trabajábamos con Valeria y, desde entonces hasta hoy, no nos hemos despegado«, ha recordado emocionado.
Reconociendo que la enfermedad de la actriz es «muy dura», Moncho ha revelado que aunque no solamos verle, su hijo Augusto está muy pendiente de Carmen en todo momento: «Es un tío extraordinario, fuera de serie». «¿Quién ha dicho que no viene a verla? La relación con su madre es muy buena, la tiene entre algodones, pero cada uno manifiesta sus sentimientos de una forma», afirma.
En Cotilleo.es sabemos que Augusto está muy preocupado por Carmen Sevilla y que le visita siempre que puede, a pesar de que esta información no trascienda a los medios. La actriz era la persona más famosa de su época, pero su familia prefiere guardar las formas porque no se sienten cómodos en el mundo del espectáculo.
Es cierto que el hijo de Carmen ha concedido varias entrevistas hablando de su vida, pero siempre lo ha hecho por motivos justificados. Recientemente confesó que su madre se encontraba bien, pero que era una lástima verla porque había perdido todos sus recuerdos. En Fiesta, programa de Telecinco, han contado que la actriz no tiene consciencia y no sabe que en su época era una persona muy poderosa e influyente.
La formidable trayectoria de Carmen Sevilla
>Además, y a pesar de que la inolvidable presentadora del Telecupón lleva casi 11 años enferma, su mejor amigo asegura que está «entre algodones» y que nota su alegría cada vez que va a visitarla «en la expresión de sus ojos». Es una mujer diferente, pero no ha perdido su esencia y sigue teniendo tanto arte como siempre.
Por eso, y a pesar de ser una leyenda viva de nuestro país, Moncho cree que no es momento de hacerle homenajes porque, desgraciadamente, no es consciente del cariño que toda España siente por ella: «No me gusta mentir, su estado es delicado». Delicado que no preocupante, como destaca, asegurando que «estar está bien aunque por años todo siempre preocupa». Moncho no se ha dejado nada en el tintero.
«En su día a día hace ejercicios de gimnasia, se da una vueltecita por el centro, que es una maravilla. Ya firmaríamos todos por estar así cuando seamos mayores. No está al alcance de todo el mundo» añade, aplaudiendo una vez más lo pendiente que está Augusto de su madre.
En cuanto al extenso patrimonio de Carmen, Moncho prefiere mantenerse al margen y, como comenta con una sonrisa, «no entro en patrimonios ni en bodas, ni en banquetes, ni bautizos. Está controlado todo por los abogados, ahí no me meto. Es mi precio y mi lealtad con las grandes estrellas» concluye.