En Cotilleo.es estamos en disposición de afirmar que Letizia Ortiz siempre lleva el vestido adecuado. Nos hemos puesto en contacto con varios responsables y expertos en moda y nos han asegurado que la reina está muy bien asesorada. Según nuestra información, ella tiene siempre la última palabra, pero no puede elegir libremente un vestido u otro porque en Casa Real sabe que esta elección va a estar inspeccionada con lupa. Guarda todos sus trajes a buen recaudo porque sabe que son piezas de coleccionista e incluso le deja prendas a sus hijas. Es evidente que cualquier diseñador estaría encantado de vestirla porque sabe que esto es una buena publicidad.
El 12 de octubre es una fecha muy especial para la Familia Real. Todos se fijan en el comportamiento que tienen los miembros de la familia del rey, pero Letizia debe estar especialmente atenta. Es cierto que ha protagonizado muchos escándalos relacionados con el mundo del corazón. Pero hay que dejar claro que en muy pocas ocasiones ha recibido comentarios negativos por la ropa que ha elegido en los eventos. Letizia Ortiz solamente tiene fallo, según el punto de vista de los estilistas que han analizado los vestidos que se ha puesto en la Hispanidad. La reina es demasiado delgada y a veces elige trajes que no hacen honor a su figura.
La estricta dieta de la reina
>Letizia Ortiz es víctima de muchos rumores que no se corresponden con la realidad, pero también es cierto que otras teorías son completamente correctas. La reina tiene muy controlada la alimentación de sus hijas y revisa estrictamente el menú que reciben. Según ha salido publicado, ha tenido varios problemas con la reina Sofía la emérita le hace regalos a las obras que no son del agrado de Letizia. Dicen gominolas y caramelos. Justo lo contrario a lo que quiere Letizia. Creen en las niñas deben llevar una alimentación más saludable y no consiente que nadie se salte sus normas.
La mujer de Felipe impuso unas reglas muy claras nada más entrar en Zarzuela. No tardó en darse cuenta que no era bien recibida por todos, así que solamente le quedó una opción: plantarse. Sus enemigos han comprobado que es una persona con mucho carácter y no pierden el tiempo en luchar contra ella. También hay que tener en cuenta que cada vez tiene más poder y que los espectadores le quieren cada vez más. Por eso hay cierto pudor al hacer comentarios negativos sobre ella, incluso la hora de juzgar su estilo. Muchos expertos en moda aprovechan corrientes antimonárquicas para juzgar a la reina y eso está muy juzgado.
No es ningún secreto. Letizia no tiene buena relación con sus suegros porque desde el primer momento se sintió juzgada. Esto ha hecho que los periodistas afines a la corona reaviven una guerra que todavía no ha terminado y que va a tener un final funesto. Las comparaciones entre Letizia y Sofía cada vez son más frecuentes y es evidente quién ha ganado la batalla. La reina vigente se ha convertido en un icono de la elegancia y es un referente para muchas mujeres.
Letizia ha impuesto sus normas
>Letizia ha brillado en la Hispanidad, como siempre. Es cierto que todavía hay muchos que vierten comentarios negativos hacia ella. Pero no hay que olvidar que su comportamiento siempre es el mismo. No pierde el tiempo en entrar en provocaciones. Sabe que sus pasos están estudiados al detalle y se esfuerza para no alimentar a sus enemigos. Esta tarea es imposible, pero por lo menos ha logrado que los que están cerca de su familia se mantengan al margen del conflicto y que no ayuden a alimentar ciertos movimientos de odio.
Don Juan Carlos ha cometido errores que en la reina hubieran sido imperdonables y sin embargo sigue teniendo muchos aliados. El público se está dando cuenta de este tipo de detalles y cada vez resulta más complicado meterse con Letizia. ¿Estamos ante el principio de un movimiento histórico? Es evidente que el rey tiene mucha más importancia a nivel histórico que su mujer, pero de un tiempo a esta parte la reina está teniendo un papel muy importante y muy influyente. Tanto que cualquier periodista estaría encantado de hablar con ella.