El pasado 22 de agosto trascendía la noticia: Xisca Perelló había sido ingresada en una clínica privada de Palma de Mallorca coincidiendo con su semana 31 de embarazo. Tal y como publicó entonces ‘El Diario de Mallorca’ la mujer de Rafa Nadal permanecería ingresada por lo menos hasta la semana 34 de gestación y no se descartaba su paso por quirófano.
Desde entonces, apenas hemos sabido nada del estado de salud de la mallorquina, aunque fuentes hospitalarias confirmaron que necesitaba reposo absoluto – para no poner en riesgo al bebé con un parto prematuro – por lo que le habrían recomendado que una vez recibiese el alta no volviese a la casa que comparte con el tenista en Manacor sino que se quedase en Palma, lo más cerca posible del hospital.
Una filtración que habría molestado a Rafa Nadal, que hace tan solo unos días – al recibir de manos del Rey Felipe VI el premio ‘Camino Real’ – rompía su silencio, reconociendo que el último año había sido «distinto y complicado». «Ha habido alegrías pero también momentos difíciles», reconocía, haciendo referencia al ingreso de Mery y a su preocupación porque su bebé esté bien.
Ahora ha sido la hermana del tenista, Maribel Nadal, la que nos ha contado cómo se encuentra su cuñada. La joven ha acudido al acto «Euro de tu Nómina» presidido por la Reina Letizia en representación de la Fundación Rafa Nadal y, con una sonrisa, ha confesado que tanto Rafa como Xisca se encuentran «muy bien».
Sin embargo, respetando los deseos de su hermano de que trascienda públicamente lo mínimo sobre el embarazo de su mujer, ha evitado desvelar si Mery continúa ingresada o si, por el contrario, ya está en casa contando los días para el nacimiento de su primer hijo, previsto para este mes de octubre.