Hay muchos platos que se reinventan y otros que nacen, pero está claro que los clásicos ganan hasta más valor con los años. La tortilla de patatas es uno de ellos, de los más ricos y más sabrosos, que nos ha llevado a la popularidad mundial.
A lo largo de estos años, la gastronomía ha cogido más relevancia y está en el lugar que merece, hoy los niños sueñan con ser grandes chefs y están entre fogones desde la infancia. Esto va de la mano con la innovación y el tener muy presente las nuevas modas y necesidades de la sociedad. Una de ellas, el estilo de vida saludable. La importancia de cuidarse en cuerpo y mente y la cantidad de »gurús» sobre esto que nacen, está haciendo que también haya muchas recetas que se ven alteradas para poder seguir disfrutando, aunque de manera más sana.
Está claro, que se puede comer de todo sin excederse, pero para quienes no se permiten ni »ese capricho» surgen nuevas alternativas, como esta tortilla de patatas campera, con la sorpresas de que está hecha ¡sin huevo!
Ingredientes
1 patata
1 berenjena
1 calabacín
1 cebolla
1 pimiento verde
Aceite de oliva y sal.
Para el “no huevo”:
3 cucharadas de harina de garbanzo
2 cucharadas de almidón de maíz (maicena)
1 cucharadita de levadura tipo Royal
œ cucharadita de sal
Unas gotitas de vinagre de manzana (para suavizar el sabor de la harina de garbanzo)
200 ml de agua
El paso a paso de la tortilla de patatas sin huevo
Troceamos a dados muy pequeños la berenjena, el calabacín, la patata, la cebolla y el pimiento. Añadimos la sal y aceite de oliva y horneamos 40-45 min en una bandeja de horno con tapa (o la tapamos con papel de aluminio). Preparamos el “no huevo” mezclando en un bol todos los ingredientes y batiendo con ayuda de unas varillas hasta que quede una textura parecida a la del huevo.
Echamos las verduras al “no huevo” y mezclamos. Ponemos al fuego una sartén antiadherente con un chorrito de aceite de oliva y, cuando el fuego este bien calentito pero sin llegar a humear, echamos la masa de las patatas. Bajamos el fuego casi al mínimo. La hacemos unos 5-7 minutos por lado moviendo de vez en cuando la sartén en forma de círculos para que no se pegue. Si se pega, no desistáis y volved a darle forma.
Dejamos reposar la tortilla mínimo durante 20- 30 minutos antes de servir para que se asiente y coja cuerpo. A las tortillas veganas hay que cogerles el punto, pero una vez se les coge, ¡son irresistibles!. Preparad una sartén antiadherente y tened paciencia si en la primera vuelta se os pega un pelín, que es normal. ¡A disfrutar!
Todas las curiosidades a la hora de hacer una tortilla
¿CON CEBOLLA O SIN CEBOLLA?
Añadir cebolla a la tortilla es una opción personal, desde luego la que ganó el premio a ‘Mejor tortilla de patata de España’, como contamos, sí que la lleva. Si decides incluirla, pícala en trozos no demasiado pequeños y fríela junto con las patatas. Por lo general, una cebolla es suficiente para una única tortilla. Y en este caso también puedes jugar y añadir la cebolla blanca dulce, morada o la convencional. Todo es probar.
Y LA SAL, ¿CUÁNDO?
Lo mejor es salar las patatas una vez que estas estén fritas, al gusto. Al contrario de lo que se pudiera pensar, no es recomendable echar sal a los huevos batidos.
LOS HUEVOS IDEALES
Lo recomendable es usar un huevo por 100 gramos de patatas, pero si eres más de cocinar a ojos, la clave está en que la mezcla de huevos batidos quede justo al nivel de la patata y la cebolla cuando estas se añadan. Si estas quedan sumergidas o flotando, significa que nos habremos pasado. A la hora de batir los huevos hay que tener en cuenta que el objetivo es no acelerar su coagulación, es decir, que quede batido y líquido pero sin pasarse. Bastará con que los batamos durante alrededor de un minuto.
Es uno de los paso más importantes. Antes de incorporar la patata al huevo batido se debe escurrir todo el aceite posible. Y es recomendable dejar reposar la mezcla durante unos 3 minutos para que se integren todos los sabores.
¿QUÉ ACEITE USAR?
Para preparar una tortilla de patatas basta con utilizar aceite de oliva suave. No es necesario que sea virgen extra, ya que lo vamos a utilizar para freír. De hecho, volviendo al referente de la que ha ganado el premio este año a la »mejor tortilla’, se ha elaborado con aceite de girasol precisamente para que el aceite contagie el mejor sabor posible. Por lo que un aceite de oliva suave es la mejor opción.
CUAJADA O CRUDITA
Si prefieres una tortilla cuajada y de consistencia más dura, debes remover mucho la mezcla antes de dejar que se haga el fondo. Si por el contrario quieres una tortilla poco cuajada y muy jugosa, no remuevas la mezcla y deja que el fondo se haga sin seguir mezclando. La sartén, para lograr que quede crudita por dentro y hecha por fuera, tiene que estar muy caliente y ser rápidos en dar la vuelta a la tortilla, no más 30 o 40 segundos en dar la vuelta, dependiendo de lo grande que sea la tortilla.
TIEMPO DE SARTÉN
Vierte unas gotas de aceite en la sartén y espera a que esté muy caliente. Después vierte la mezcla de huevo y patata y dora cada parte durante unos 30 o 40 segundos. Utiliza un plato para dar la vuelta a la tortilla.