Fue el pasado 4 de agosto cuando la plataforma de contenidos Netflix estrenó la docuserie de Tamara Falcó, La Marquesa. Una propuesta que revela cómo es la rutina de la hermana más famosa de Enrique Iglesias que acumula la friolera de 1,3 millones de seguidores en Instagram y cuya influencia cada día es mayor.
Una condición que inevitablemente ha favorecida a su pareja, el diseñador y empresario Íñigo Onieva que, si bien siempre se ha mantenido alejado del foco mediático, ahora mismo tiene, nada más y nada menos, que algo más que 54 mil followers, que se dice pronto.
El protagonismo de Íñigo Onieva en el documental de Tamara Falcó
>Fue el pasado noviembre, coincidiendo con el cuarenta cumpleaños de Tamara Falcó, cuando empezaron las grabaciones de La Marquesa. Una iniciativa que gira entorno al restaurante que va a montar en El Rincón, el palacio que heredó de su padre, cuando falleció a causa del covid el pasado 20 de marzo del 2020, el Marques de Griñón, Carlos Falcó.
Un documental en el que se muestra a Íñigo Onieva como un novio comprometido, comprensivo y orgulloso de su Tamara aunque son, como ella misma dice, «totalmente diferentes«. Una condición que no es un problema para la hermana de Julio Iglesias que, como apunta en varias ocasiones, tiene intención de tener un futuro con Íñigo, con el que se ve casándose y teniendo hijos.
Tanto que a lo largo de la docuserie es la propia Tamara Falcó y su entorno más cercano los que hacen varias alusiones a su posible boda con el hermano de Alejandra Onieva, con tono de broma, pero claro, como se dice queridos Cotillas, entre broma y broma la verdad se asoma, por lo que no nos sorprendería nada en la redacción de Cotilleo.es que en pocos meses, un año a más tardar, sonaran campanas de boda.
De hecho, tan grande es el compromiso que tienen el uno con el otro, que Tamara Falcó le ha dedicado varios minutos de uno de los capítulos, a enseñar en pantalla el nuevo proyecto de restauración de su amor, el restaurante que forma parte Mabel Hospitality, la empresa de la que es director, y de la que es socio el tenista Rafa Nadal. Casi nada.
Un apoyo que es totalmente mutuo, y es que en esta serie son frecuentes las conversaciones de la pareja en las que se, racionalmente, negocian cómo van a programar su futuro. Un futuro en el que ambos saldrán beneficiados, Íñigo Onieva también.
Íñigo Onieva, ¿nuevo influencer masculino?
>¡Lo que Íñigo Onieva está siendo toda una sorpresa! Y es que, según el Google Trends el nombre del empresario duplicó la búsquedas del de su novia, durante la primera semana del estreno de La Marquesa. Es más, según datos del perfil de Social Blade en el mes de agosto, el nombre del diseñador ha disparado el número de seguidores de su Instagram, con un un 397% y puede presumir de tener una engagement del 5,09%.
Unos datos que nos hacen plantearnos una cuestión: ¿Podría ser Íñigo el nuevo influencer masculino? Seguramente que, si así fuera, Tamara Falcó le apoyaría encarecidamente. Y es que, si algo hemos podido comprobar en la docuserie es que tienen una comunicación tan buena que, de una manera o de otra, van a llegar a una acuerdo.
Eso es justamente lo que ha pasado con la devoción católica de Tamara Falcó que su novio no comparte. Pero eso no es un problema para los enamorados, porque su querido Íñigo, le ha prometido que él le acompaña todos los domingos a la iglesia, si ella va con él los viernes por la noche a bailar a una de las discotecas más famosas de la noche madrileña. Aunque, como él mismo ha reconocido, la hermana de Ana Boyer suele escaquearse bastante más que el empresario, algo que no le importa demasiado a Onieva que la quiere tal y como es.
Por eso mismo, sonríe ante sus ocurrencias y comparte todo el tiempo que puede con su familia. Algo que, como no podía ser de otra manera, también hace Tamara Falcó. De hecho, una de las invitadas estrellas de la cena que dio en El Rincón fue la hermana más famosa de Onieva, que en su momento se la relacionó con el exportero del Real Madrid, Iker Casillas, y que ha formado parte del elenco de series tan conocidas y vistas en nuestro país como la telenovela El Secreto de Puente Viejo, en la que daba la vida a Soledad, y en Alta Mar en la que hacía de Carolina Ochoa. Y sí, queridos Cotillas, nos estamos refiriendo a la despampánate rubia de ojos verdes, Alejandra Onieva.