Las arrugas en el rostro comienzan a aparecer con la sequedad de la piel. Es común que suceda a partir de los 30 años y puede provocar descamación, irritación, rojeces e incluso, agravar la profundidad y la apariencia de arrugas. Con frecuencia que esa sequedad se produzca porque descienden los niveles de ceramidas en la piel.
Cuando su nivel desciende, la piel pierde elasticidad y queda más expuesta a los elementos, razón por la que puede desarrollar ciertas patologías. Aumenta su sensibilidad y se marcan más las arrugas, las líneas de expresión o las conocidas como patas de gallo. A continuación te contamos cómo eliminarlas con este simple truco.
1Las ceramidas y la prevención de arrugas
“Las ceramidas funcionan como el ‘pegamento’ que mantiene unidas a las células de la piel. Algo así como el cemento que une los ladrillos de un edificio. Básicamente, ¡son el arma ideal para mejorar y defender la barrera protectora de tu piel!”, explican desde el Blog de Belleza, Meikki. Las ceramidas son básicamente lípidos de alto peso molecular, de composición casi idéntica a la piel, lo cual hace que penetren la piel a profundidad, sellando y manteniendo dentro la humedad. Esto las hace ideales para hidratar, dejando la piel rellenita y suave.
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