Lejos de un posible acercamiento entre madre e hijo, Rocío Carrasco y David Flores tendrán que verse de nuevo las caras delante de un juez. La polémica e inexistente relación de Carrasco con sus dos hijos, fruto de su matrimonio con el ex guardia civil Antonio David Flores, se ha convertido en un auténtico calvario para la hija de la más grande. La protagonista de la docuserie, ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva‘, deberá personarse en los juzgados para defenderse de la querella interpuesta por el menor de sus hijos por impago de la pensión compensatoria.
1Rocío Carrasco, una madre rota
>La complicada relación que mantiene Rocío Carrasco con sus dos hijos es una larga historia, que se remonta a más de dos décadas. Con su primogénita Rocío Flores, no mantiene contacto desde el 27 de julio de 2012. Muchos han sido los rumores que han circulado sobre el distanciamiento entre madre e hija, pero lo cierto es que el testimonio, en primera persona, de la colaboradora se hizo esperar hasta el pasado año. En la docuserie ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’, producida por La Fábrica de la Tele, la hija de la Jurado se sinceraba sobre el detonante que acabó por dinamitarlo absolutamente todo.
Sin duda, unas impactantes declaraciones que no dejaron en buen lugar a Rocío Flores. Entre lágrimas, y sin apenas poder articular palabra, Rocío Carrasco destapaba la brutal agresión que sufrió por parte de la entonces menor, que la llevó a ser ingresada de urgencias. En la sentencia redactada por el Juzgados de Menores, se manifiesta que los hechos acaecidos se produjeron «sobre las 8:00 h. del día 27 de julio de 2012, encontrándose la menor en el domicilio familiar junto a su madre, la pareja de esta y su hermano». Dicho informe viene a confirmar que la hija mayor inició una discusión con su madre y que «en el transcurso de la cual le propinó varios golpes, llegando incluso a tirarla al suelo, para posteriormente seguir golpeándola, dándole varias patadas».
Posteriormente, tal y como refleja el documento, «Rocío Carrasco sufrió policontusiones con equimosis en la región frontal derecha, con edema en ambas muñecas, en muslo derecho, en el antepié derecho y un hematoma en el segundo dedo del pie derecho, para cuya curación únicamente precisó de una primera asistencia facultativa y de las que tardó en sanar ocho días, uno de los cuales estuvo impedida para el ejercicio de sus ocupaciones habituales».
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