Gusten más o menos, pero lo cierto es que las pizzas son uno de los alimentos ultra procesados que gusta a casi todo el mundo, por mucho que no estén dentro de los productos más saludables del supermercado ni formen parte del movimiento ‘realfooding‘. Por ese motivo, y porque pueden sacarte de un apuro en caso de tener visitas inesperadas, suelen estar en el congelador de casi todas las casas. Existen tantas variedades y sabores para que cada uno pueda tener su favorita, e incluso entre las diferentes marcas encontramos varias texturas y sabores para elegir, pero es bueno tener claro que no todas son iguales y que hay grandes diferencias entre escoger unas u otras.
2Los ingredientes de las pizzas
A la hora de analizar las pizzas más saludables hay que fijarse en todos los ingredientes y saber que «si en el envase se destaca alguno, ya sea con imágenes o con palabras, debe indicarse la proporción concreta en la que se encuentra«. En los casos analizados por Eroski Consumer, «los ingredientes que se promocionan se encuentran en cantidades significativas y suelen ser los principales, tras la harina, el tomate y, en ocasiones, el queso«. La calidad del aceite es importante, pero no tanto teniendo en cuenta que está en cantidades bastante pequeñas. Para elegir la mejor también hay que tener en cuenta la puntuación Nutri-Score y si la información comercial aporta valor o puede llevar a confusión al consumidor.