La OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) sabe, como cualquier ciudadano de este país, que lo peor que hay a la hora de ir a un bar o restaurante a comer es el momento de tener que pagar la cuenta. La mayoría de las veces, en ésta se refleja lo que hemos consumido y lo que más o menos esperábamos, pero hay ocasiones en las que al ver la misma nos llevamos una desagradable sorpresa al ver que el precio se ha incrementado por cosas que desconocíamos que teníamos que abonar, como pueden ser unos hielos o la leche del café. Aquí vamos a ver las cosas por las que no te puede subir ninguna factura en la hostelería.
5El Covid y el agua de grifo
Si ya quedaba reflejado el sentir de la OCU en el tema de las reservas y el Covid, aquella quiere aclarar que no deberían repercutir al cliente las tareas de mantenimiento y limpieza a las que se ven obligados por la pandemia. Pero si lo hacen, es preciso informar claramente por adelantado y el usuario tiene que aceptarlo expresamente. Por otra parte, la OCU lleva años reclamando una ley nacional que obligue a los establecimientos de hostelería y restauración a ofrecer de forma gratuita a sus clientes un recipiente con agua fresca, la famosa jarra de agua, como alternativa a la oferta que tenga el establecimiento de agua envasada, algo que ha conseguido con la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular, que establece que deben siempre ofrecer a los usuarios agua del grifo, no envasada y de manera gratuita.