Don Felipe y doña Letizia lo tuvieron difícil para casarse. Él estaba completamente enamorado y no dudó en echarle un pulso a don Juan Carlos. Estaba dispuesto a renunciar a la Corona. De eso hace ya quince años. Hoy, la entonces periodista es Reina y su fuerte carácter ha provocado que su matrimonio haya atravesado fuertes crisis. También ha marcado un distanciamiento sin retorno con su familia política.
8¿Qué pasaría si se divorciasen?
En caso de divorcio, la vida de doña Letizia daría un giro importante. El tema económico lo tiene resuelto de por vida ya que está previsto que reciba una más que generosa asignación. En cuestión de vivienda, ningún problema. Tendría dos a su disposición, acondicionadas a su gusto y con el servicio necesario para atenderla. Sin embargo, en cuanto a la custodia de sus hijas, renunció en el mismo momento en que firmó las capitulaciones matrimoniales.
Según relató el primo de doña Letizia en su libro Adiós, Princesa, cuando la hoy Reina le llamó para tratar el asunto de las capitulaciones, le aconsejó que no las firmara: “Esto no son capitulaciones matrimoniales, Letizia. Este documento no es ni tan siquiera legal, al menos en algunos aspectos”. David Rocasolano hizo hincapié en la cuestión de la custodia de los futuros hijos de la pareja: “En un contrato privado, ni en uno público, se puede pactar la custodia de un menor sin pasar por un juzgado”.
La custodia de las hijas de Letizia y Felipe
En las familias reales, el asunto de las capitulaciones es algo innegociable, así se lo hizo saber don Felipe a doña Letizia: “Hay que firmarlas tal como están redactadas. No se puede cambiar ni una coma”. Visto lo visto, si el divorcio sucediera, podría empezar un Kramer versus Kramer. De todos es sabido la dedicación de la Reina a sus hijas. No puede pasar sin ellas. En este punto, no cede. Leonor y Sofía son cosa suya y de ahí que se ocupe y preocupe en estar el mayor tiempo posible con ellas.
La Reina es de aquellas madres que va al colegio a hablar con los profesores y se sienta con las infantas para hacer los deberes. De hecho, tanta dedicación ha llevado a algunos maledicentes a criticarla sin fundamento alguno. Ella lo tiene claro, madre antes que Reina. Por tanto, las las niñas son lo primero en su vida.
¿Cómo será al vida de Letizia?
La de doña Letizia no será ni mucho menos la vida de una alegre divorciada. Como madre de la heredera, debe ser ejemplar y parecerlo. Por tanto, si volviera a enamorarse, tendría complicado casarse. La suya sería una existencia de perfil bajo y solo aparecía en la foto oficial en caso de celebraciones relacionadas con sus hijas: bodas, bautizos, comuniones, graduaciones…
Al deja de pertenecer a la Familia Real, Letizia no tendría obligaciones de representación. En caso de que don Felipe necesitara acompañante para algún acto, esa misión recaería en su hermana Elena o bien en su madre. Aunque, visto lo visto, el Rey se desempeña muy bien solo. Desde muy joven, ha acudido a tomas de presidencia y otros actos de gran envergadura social para los que estaba aconsejado acudir acompañado y se ha desenvuelto muy bien en solitario.
Agenda pública de Don Felipe y Doña Letizia
Nada más matrimoniar con don Felipe, doña Letizia intentó tener agenda propia. Sin embargo, eso se desaconsejó en Zarzuela porque podría no ser entendido y tampoco bien recibido. La entonces Princesa de Asturias comprendió las explicaciones que le dieron, y como lo que realmente quería era trabajar por España, se puso al servicio de la Corona.
A excepción de algunos actos, los Reyes siempre van juntos. Esto ha hecho que doña Letizia esté comprometida con muchas causas sociales pero con ninguna en particular. Quizás, en caso de divorcio, podría involucrarse en proyectos humanitarios que fueran de su agrado. Eso sí, siempre con el visto bueno de la Casa Real.