No son una, dos ni tres las fotos del Rey Juan Carlos que avergüenzan y escuecen en el foro interno de la Casa Real. El emérito ha reinado durante 39 años con la mano pasada de oro por la protección excesiva de los medios de comunicación en este país.
4«No volverá a ocurrir»
Ni el orgullo Borbón, ni la posición dinástica de superioridad. No había excusa para no salir ante los medios de comunicación después de su operación de cadera, apenas quince segundos y emitir las diez palabras que tenía pactadas con sus hombres de confianza. Por supuesto que don Juan Carlos no pisó con fuerza esa pequeña sala de prensa. Lo hizo con muletas y no estaba ese perdón fundamentado en la pillada furtiva con su amiga Corinna.
En aquel entonces, el Rey asumió su culpa porque se escapó a hurtadillas para disfrutar de una jornada de caza en África mientras España vivía sumida en el peor año de su última crisis económica: «Lo siento mucho, me he equivocado y no volverá a ocurrir«. De su boca salieron once palabras cuando en realidad se pactaron diez. En ningún caso se había contemplado la posibilidad de que el rey dijese «mucho» después del «lo siento». Ni mucho menos.