La tortilla de patata es nuestro plato patrio por excelencia y una delicia para la mayoría de los comensales de todo el mundo. La receta, a priori, parece muy sencilla, pues solo hay que juntar las patatas, los huevos y en algún caso la cebolla en la sartén y con el toque justo de aceite y sal. Todo parece fácil hasta que llega el temeroso momento de dar la vuelta a la tortilla ¡cómo se nos resiste! Para ayudarte con ello hoy te mostramos algunos trucos.
1La base bien cocinada
La sartén para cocinar la tortilla de ser de buena calidad y del tamaño apropiado, es decir, acorde con la cantidad de ingredientes que se van a introducir. Es importante que también sea antiadherente para evitar problemas.
Cuando los utensilios sean los adecuados se puede empezar a cocinar, y entonces bes cuando hay que reparar en que la base de la tortilla esté bien cocinada antes de darle la vuelta, de lo contrario será un auténtico desastre.