Estrenar zapatos puede ser una acción de riesgo, sobre todo con determinados tipos de suela. Generalmente, las suelas de madera, cuando están muy nuevas, es fácil que resulten mucho más deslizantes sobre el pavimento, cosa que empeora si el suelo está húmedo. Además de arriesgarnos a una desafortunada caída, o a torceduras de tobillo, caminar sobre unos zapatos muy resbalosos, resta seguridad con cada paso, y nos obliga a ir pisando con extrema precaución, en vez de caminar de forma natural. Pero existen algunos trucos baratos y caseros que podemos aplicar para no volver a resbalar jamás.
7REFRESCOS AZUCARADOS
Otra solución muy eficaz es aplicar un poco de refresco utilizando un poco de algodón. Empapamos la superficie de la suela y dejamos secar. No solo evitaremos resbalones, sino que será imposible resbalar. También se puede emplear una mezcla de agua y azúcar, mezclando el azúcar en agua tibia para que se disuelva. Después hacemos lo mismo con un algodón. Si te desagrada el efecto adhesivo y pegajoso en el suelo, recurre a los trucos anteriores.