Estrenar zapatos puede ser una acción de riesgo, sobre todo con determinados tipos de suela. Generalmente, las suelas de madera, cuando están muy nuevas, es fácil que resulten mucho más deslizantes sobre el pavimento, cosa que empeora si el suelo está húmedo. Además de arriesgarnos a una desafortunada caída, o a torceduras de tobillo, caminar sobre unos zapatos muy resbalosos, resta seguridad con cada paso, y nos obliga a ir pisando con extrema precaución, en vez de caminar de forma natural. Pero existen algunos trucos baratos y caseros que podemos aplicar para no volver a resbalar jamás.
6FROTAR UNA PATATA
Como lo lees. Es un truco casero, tan raro como eficaz, con el que podemos evitar que los zapatos resbalen. Todo se debe al almidón de esta hortaliza, que crea una capa antideslizante que nos dará más estabilidad en cada paso. Solo hay que tomar una patata cortada por la mitad y frotarla en la suela del zapato. Deja que seque y actúe un par de horas y listo. Funciona incluso sobre suelos mojados.