Se acerca la Semana Santa y con ella las torrijas, el dulce más típico quizás de la época. Dos cosas, o tres si se cuenta el precio que tienen aquellas en muchas pastelerías o bares donde se venden, son las que quitan a muchos las ganas de hacerlas. Por un lado el tiempo que se suele tardar en dicha misión, que no es baladí, y por otro el que siempre han sido considerado uno de los alimentos que más engordan, algo que es sin duda lo que más echan para atrás a la hora de consumirlas, sobre todo los que ya han empezado con la particular «operación bikini», ansiosos por llegar en buena forma física al verano. Aquí sin embargo vamos a mostrar cómo se puede consumir una buena torrija, o varias, sin tener que engordar lo más mínimo.
4Con la receta de toda la vida
En el caso de hacer las torrijas en estas freidoras de aire lo bueno es que para hacerlas ni siquiera vamos a necesitar aceite, algo que es obligatorio y de forma abundante en el caso de que las friamos en la sartén. Las freidoras de aire cocinan los alimentos a través de chorros de aire caliente que circulan a gran velocidad en el interior del aparato, por lo que los alimentos resultantes son más saludables. Otra de las ventajas de las freidoras sin aceite es que no es necesario cocinar una receta concreta, sino que podemos elaborar nuestras torrijas con la receta familiar o la que hemos utilizado durante toda la vida.