10 años después de sentarse por primera vez en el banquillo por el Caso Malaya, Isabel Pantoja ha regresado a los juzgados de Málaga. La tonadillera revive de nuevo su peor pesadilla, hacer el paseíllo hacia el Juzgado de lo Penal número 5 de la ciudad de la Costa del Sol. Lo hace para prestar declaración ante el juez, acusada de un presunto delito de insolvencia punible, por el que podría enfrentarse hasta a 3 años de prisión y una multa que ascendería a 11.000 euros. De riguroso luto y acompañada de su hermano Agustín Pantoja, ha vuelto a hacer ese camino que seguro que no pensaba que volvería a tener que hacerlo jamás…
7Llorando y con ansiedad: la sombra de volver a prisión es muy alargada
> Por mucho que haya intentado por todos los medios verse ahí de nuevo, 10 años después, incluso por haber echo esfuerzos por llegar a un acuerdo extrajudicial con la sociedad querellante, se ha tenido que sentar. Ya una vez dentro, Isabel Pantoja nos ha vuelto a retrotraer a su figura de cuando se convirtió en la viuda de Paquirri. Ya sin gafas de sol, Pantoja no ha podido contener las lágrimas y víctima de la ansiedad, el juez le ha instado a que se tranquilizase para que pudiera dar comienzo la vista.
Lo que está en juego es muy grave, 3 años de prisión los que le podría caer a Isabel Pantoja. La sombra de que regrese de nuevo a la cárcel es muy alargada y podríamos volver a ver a la cantante como aquellas imágenes que ha querido borrar de su memoria.