Relacionar costillas de cerdo con una barbacoa es lo más natural. Con esta receta que vamos a desarrollar va a quedar demostrado que es posible preparar las primeras sin necesidad del segundo aparato ni tan siquiera de ir a un restaurante. El secreto es cocinar las costillas a baja temperatura. La ventaja es que, con esta técnica de hornear, podremos disfrutar de este plato sin necesidad de pasar un largo rato en la cocina con su preparación. Que nadie quedará insatisfecho lo demostrará el resultado final, ya que la carne se desprenderá del hueso como las hojas de los árboles en otoño, porque estará tierna y jugosa, manteniendo todo el sabor que pueda aportar una barbacoa. Para completar la faena se precisará eso sí una salsa barbacoa casera con la que barnizar las costillas.
4Últimos pasos de la receta
Después hay que añadir la mitad del caldo, encima de las costillas, y meterlas al horno cinco minutos. Pasado este tiempo, se le da la vuelta a las costillas y se añade la otra mitad del caldo, por encima, y otros cinco minutos al horno a la misma temperatura. Sólo quedaría sacarlas y pincelarlas con la salsa barbacoa, y volverlas a meter al horno cinco minutos a la misma temperatura. Cuando transcurra ese periodo se vuelven a sacar y se las pincelas por el otro lado para hacer de nuevo la operación de cinco minutos al horno. Ahora ya sí sólo habría que apagar éste, dejando las costillas dentro, hasta que las vaya a servir en mesa, aproximadamente diez minutos. Lo ideal es acompañarlas en la mesa con unos cuencos individuales de salsa barbacoa, para que cada comensal pueda mojar a su gusto las costillas.