Antes se tenía la idea de que el matrimonio era para siempre. Ahora hay salida a las diferencias irreconciliables, por lo que los divorcios suceden todos los días, y también en el mundo del famoseo. Eso sí, las separaciones no siempre acaban muy bien. Y estos son algunos ejemplos.
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Marc Anthony y Jennifer Lopez tuvieron una de esas grandes historias de amor. Salieron, se separaron, y volvieron a estar juntos para formar una familia. Parecía que iba a tener final feliz. Pero no fue así. Marc Anthony está hecho para tener múltiples relaciones y no ser fiel.
Da igual lo mucho que quiera a su familia o a su mujer. No pudo, y Jennifer no estaba ya para ese tipo de problemas, y decidió darle puerta. El divorcio fue uno de los más duros, pero ahora ella es feliz con su vida, y él tiene novia nueva de cuando en cuando.
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