El amor de Felipe VI hacia sus hijas lo vemos y lo percibimos en cada una de sus apariciones públicas. Es difícil no ver a un padre que se le cae la baba frente a dos bellezas como Sofía y Leonor. Ellas son todo su mundo y le han ofrecido el cambio más significativo de su vida. El soltero de oro se casaba con la periodista, pero no fue hasta que llegó Leonor cuando vio cumplidos todos sus sueños.
2Felipe VI y la niña de sus ojos
Leonor y Felipe VI comparten mucho más que el color de los ojos. Ese azul celeste que conquista a todo su pueblo y que ha llegado al corazón de un príncipe rebelde. Felipe se convirtió en padre una fría mañana de un 1 de noviembre. Llegaba al mundo su primer y heredera hija, Leonor.
Se cumplía de esta manera el mandato más importante de un príncipe y llegaba al mundo el amor de su vida. Los que lo conocen saben perfectamente cómo cambió su vida a partir de aquel momento. Felipe no cabía en el cuerpo de la emoción, era una niña preciosa, idéntica a él en muchos aspectos importantes.