Hacer chuletas de cordero lechal es una de las experiencias que menos disfrutan los que cocinan, por aquello de pensar que van a tener que limpiar toda su cocina después de freírlas, ya que el aceite salta mucho y aparece la grasa por todas partes. Eso sin contar que hay que estar muy pendiente de ellas, ya sea para que no se quemen o para que no se queden sin hacer debidamente. Ahora, disfrutar de este manjar no va a conllevar todas esa molestias, gracias a esta receta de las mismas que vamos a desarrollar a continuación y en la que la principal novedad es que se van a hacer en un horno. Hasta ahora, muchas eran las personas que creían que las chuletas no salen igual si se cocinan así, pero aquí vamos a demostrar que no sólo están igual de ricas sino que incluso salen más jugosas de la forma que elegimos.
5Ventajas de la carne de ternera
Ya sea en forma de chuletas, chuletones o chuletillas, lo cierto es que existen ciertos mitos y creencias erróneas sobre la alimentación en general y las carnes rojas en particular. Hay personas que deciden eliminarla de su dieta, ya que creen que no son saludables para el organismo, por aquello de que se dice que contienen grasas que son perjudiciales para la salud debido a su alto contenido en colesterol, ácidos grasos y triglicéridos. Contra esas ideas hay que precisar que, por el contrario, siempre que se realice un consumo moderado y que la carne sea de calidad, le estaremos proporcionando a nuestro organismo nutrientes esenciales. Sobre todo porque está demostrado que el consumo de una ración de 200 gramos de carne roja a la semana, aporta múltiples beneficios ya que posee un alto contendido de proteínas de gran calidad. Por este motivo, es una de las primera carnes que se comienzan a consumir durante la infancia, a los 6 o 7 meses de edad, y además hay que saber que 100 gramos de carne de ternera aportan a nuestro organismo 21 gramos de proteínas, 77 gramos de agua, 2,8 gramos de grasa y 70 gramos de colesterol saludable. También contiene minerales esenciales como el hierro, potasio, magnesio, calcio y zinc. Si queremos consumir carne de ternera más de una vez a la semana, una buena opción es reducir la cantidad no siendo la ternera el plato principal.