A sus 52 años, Susanna Griso se ha convertido, con la ausencia de los platós de Ana Rosa Quintana, la que había ejercido como tal hasta ahora, en la auténtica «reina de las mañanas» en televisión. Su ‘Espejo Público‘, con el que lleva desde 2006, es todo un referente político y le ha hecho ganar prácticamente todos los galardones posibles (dos Ondas, una Antena de Oro, un Premio Joan Ramón Mainat, un Micrófono de Oro y un Nipho). Aunque para muchos todo ello se deba exclusivamente a su profesionalidad y buen hacer ante las cámaras, lo cierto es que la barcelonesa parece tener ayudas ‘extras’.
4Los rezos de Susanna
Ahora, Susanna Griso está feliz tanto porque todo parece indicar que la pandemia está muy cerca de su fin, «yo quiero pensar que sí, me dicen que a partir de la semana que viene los datos deberían ir estabilizándose, mejorando en cuanto a Covid. Hay buenas perspectivas en el horizonte, la verdad», como por el momento personal y profesional que está pasando, y para el que pide ayuda divina, «virgencita, virgencita, que me quede como estoy«. La periodista tiene muchas ganas de volver a la rutina y a la libertad absoluta cuanto antes, y también reza para que «podamos hacer una vida normal, de viajar, de comer, de cenar, salir, ver gente. Cierta normalidad, recuperación turística, económica… Creo que es lo que estamos desenado todos y tengo cierta confianza en que sea así».