Corría un 20 de noviembre del año 2014 cuando Cayetana de Alba nos decía adiós. La Duquesa nos dejaba a los 88 años de edad. Fue entonces, justo en ese momento cuando su primogénito, Carlos Fitz-James Stuart y Martínez de Irujo se convertía en el nuevo Duque de Alba. Sin embargo, el hijo de la aristócrata no heredaba simplemente su título, también todo un patrimonio. ¿En cuanto está valorado? En Cotilleo.es nos hemos puesto a hacer cuentas y a contar propiedades…
1Obligado relevo: la triste pérdida de la Duquesa de Alba
> Fue sin duda una pérdida muy triste. Y es que la Duquesa de Alba, que siempre se había mostrado muy cercana con los medios, la echábamos de menos. Los títulos nobiliarios los heredaba su primogénito, Carlos. Un mes después del fallecimiento de su madre, se notaba que la ‘Casa de Alba’ había cambiado de manos. Marcando territorio que le permitía su estatus dentro de la familia, comenzaba a hacer cambios que sin duda no gustaron para nada algunos de sus hermanos, como por ejemplo Cayetano Martínez de Irujo.
Para empezar, el núcleo familiar que había formado la propia Duquesa de Alba cambiaba. Carlos Fitz-James Stuart aportaba dos hijos solamente y ninguna mujer. Radicalmente diferente a la familia que había creado Cayetana de Alba. Junto a sus dos hijos, Fernando y Carlos, ambos frutos del matrimonio que el propio Duque de Alba tuvo con Matilde Solís, componen actualmente la maquinaria que dejaba atrás su madre.
Siguiente: El cambio en la ‘Casa de Alba’ que ha enfrentado a los hermanos