Se ha convertido en uno de los principales dilemas a la hora de cuidar la salud de nuestra piel: el orden y la compatibilidad de nuestros cosméticos. Por eso es clave dejarse aconsejar antes de adquirirlos. Y no solo porque una voz experta nos guiará a la hora de escogerlos, sino también porque nos irá marcando pautas para no cometer errores. Es por eso que desde Carmen Navarro nos cuentan cómo hacerlo correctamente para que las cremas faciales funcionen, y es que aunque inviertas una gran cantidad de dinero no loo harán si no las aplicas bien ¡presta atención!
2Proteger, calmar y potenciar la luminosidad
En este caso, según aconsejan desde Carmen Navarro, debes empezar por recurrir a la vitamina C. Es el antioxidante por excelencia, clave para iluminar, purificar y aclarar la piel. De hecho, es uno de los secretos antiedad mejor guardados de esas pieles luminosas, lisas y elásticas que vemos en las revistas. Su poder nos protege de los efectos nocivos de la contaminación.
También de las radiaciones solares. Y casa a la perfección con la Vitamina E que calma y protege. El mayor secreto de su mágica combinación es que juntas son aún más poderosas y eficaces. ¿El motivo? La Vitamina E es soluble en aceite mientras que la vitamina C es soluble en agua. Gracias a ese detalle conseguimos que penetren en la piel de diferente manera potenciando su secreto antioxidante.