Congelar las verduras crudas puede ser verdaderamente práctico, ya que se extiende considerablemente su tiempo de conservación y permite almacenar siempre materia prima para guisos o sofritos. Para hacerlo correctamente toma nota de los siguientes trucos.
3Divide y vencerás
Trocear cuidadosamente las verduras te va a permitir hacer las divisiones a tu gusto antes de almacenarlas en frío.
Calcula la porción de cada persona en casa o la porción de una comida en la dosis que usas habitualmente. Así evitas descongelar verduras de más, ya que congelarlas de nuevo no es una opción recomendable.