El diestro se lesionó la pierna izquierda en una de las pruebas físicas del programa que está grabando, El Desafío.
A pesar de los insistentes rumores de crisis que siempre les han rodeado, Jesulín de Ubrique y María José Campanario son un matrimonio sólido y consolidado. Están en las duras y en las maduras, y así lo han demostrado en esta última etapa en la que los compromisos profesionales del torero le obligan a pasar más tiempo en Madrid.
Jesús se encuentra grabando El Desafío, talent show de Atresmedia en el que su mujer tendrá también una participación como invitada para realizar un reto de apnea. En una de las pruebas, el diestro de Ubrique se lesionó la pierna izquierda y tuvo que abandonar cojeando el plató en el que estaba rodando.
Siempre acompañado por María José, muy pendiente de su marido en todo momento, se dirigieron raudos y veloces a un fisioterapeuta para que tratara el daño. Fue precisamente la odontóloga la encargada de confirmar que «todo está muy bien» a pesar de la rodillera que lucía Jesulín en la rodilla.
Haciendo gala del buen momento que atraviesa su relación a punto de celebrar su 21º aniversario de boda, el de Ubrique se mostró muy orgulloso del esfuerzo que está haciendo su mujer en su nuevo reto televisivo, puesto que la prueba de apnea es muy dura tanto física como mentalmente. Levantando el pulgar y sin ocultar una inmensa sonrisa bajo la mascarilla, Jesulín confirma lo bien que lo está haciendo María José en este nuevo ‘desafío’.
Eso sí, ni el diestro ni la odontóloga han hablado de Belén Esteban ni de su próxima boda con Miguel Marcos, con quien ya planea casarse por la iglesia cuando se cumplen dos años de su enlace por lo civil.