Coinciciendo con el inicio del noveno capítulo de Rocío, contar la verdad para seguir viva, Rocío Flores regresaba a Málaga para reencontrarse con su novio, Manuel Bedmar, su padre, Antonio David Flores, y sus hermanos David y Lola después de varios días en Madrid por motivos laborales. Horas después de confesar en El programa de Ana Rosa que está atravesando por el peor momento de su vida y de asegurar que siempre que le ha molestado algo ha sido la primera en hablarlo con su progenitor pero que de ahí a que se llegue a cuestionar su papel de padre no lo entiende, la joven llegaba a casa sin demasiadas ganas de hablar.
Rocío Flores rompe su continuo y habitual silencio con la prensa
> Con un original vestido camisero con estampado de tigres y sin poder ocultar su abatimiento, Rocío ha preferido no comentar las nuevas declaraciones de su madre confesando que tras la agresión. Rocío Flores no podía volver a casa de su madre, porque ella tenía pánico y estaba muerta en vida. Tampoco se ha pronunciado sobre la traición de su padre, desvelada por la revista Lecturas, al vender su sufrimiento en un reportaje fotográfico el mismo día de la boda de su madre con Fidel Albiac.
Sin embargo, algo ha hecho que Ro rompa su compostura y su habitual impasibilidad ante las preguntas de la prensa; las declaraciones de Terelu Campos en la revista Lecturas confesando lo mal que lo está pasando al revivir el sufrimiento de Rociíto con su serie documental. Y es que, tan unida está a la que considera como su hermana, que cada vez que ve un episodio y recuerda tanto dolor, tiene pesadillas por las noches. Unas palabras a las que la joven ha reaccionado completamente alucinada, torciendo la cabeza y preguntando incrédula «¿Cómo? No me he enterado».
Una actitud de sorpresa absoluta que ha repetido – sin poder evitarlo – cuando le hemos preguntado por las burlonas declaraciones de Jorge Javier Vázquez, asegurando que le ha vetado y comentando que el día de mañana vetará a Ana Rosa Quintana, se quedará con su programa, pondrá a Olga Moreno a presentar y se llamará su nuevo espacio «Todo sobre mi padre«. Unas palabras tan irónicas como frías que han dejado a Ro completamente ojiplática, sin dar crédito a que el comunicador le acuse de haberle impuesto un veto en Supervivientes.