Las patatas fritas parece una de las guarniciones más sencillas de elaborar, pero un resultado perfecto no es tan fácil como parece. Con esta receta que hoy te vamos a mostrar aprenderás a elaborar la ecuación culinaria perfecta, es decir, que estas queden tiernas por dentro y crujientes por fuera. Son muy sencillas de preparar si sabes cómo, y ya no querrás hacerlas de ninguna otra manera.
5Servir y disfrutar
Recuerda añadir sal a las patatas fritas en cuanto las saques del aceite, y ya las tendrás listas. Lo ideal es degustarlas recién hechas, aunque si quieres prepararlas con cierta antelación puedes dar la primera fritura, reservarlas e incluso congelarlas.
Entonces, justo cuando las vayas a servir, se da la segunda fritura a temperatura alta para que terminen de cocinarse y se doren. Una vez listas se pueden usar como guarnición para todo tipo de platos, como picoteo o incluso añadir salsas, especias o aderezos al gusto.