Con un pie en España y otro en Andorra, donde tiene fijada su residencia habitual, y sin aparecer apenas en público desde que comenzó la pandemia del Coronavirus, Tita Cervera ha viajado hasta la capital para seguir de primera mano las negociaciones del Museo Thyssen con el Ministerio de Cultura de España para que su colección se quede en nuestro país.
El pacto firmado incluye la vuelta del Mata Mua y un alquiler anual de 6,5 millones de euros durante quince años por el grueso de la colección. Con la naturalidad que le caracteriza, la Baronesa confirmó a los medios que llegarán a un acuerdo pero que, de momento, están trabajando en ello: «Estamos llegando y llegamos seguro, pero es normal que se tarde un poquito».
– ¿Ha llegado ya usted al acuerdo con el Ministerio?
– «Estamos llegando y llegamos seguro, pero es normal que se tarde un poquito.»
– Me imagino que muy contenta.
– «Muy contenta y todos los del museo también, el señor Solana… todos.»
– Que llegue a buen término seguro.
– «Todo va bien, seguro.»
– Los españoles quieren que esto llegue a buen puerto.
– «Yo, como también soy española, también lo quiero.»
– ¿Todo bien?
– «Todo bien.»
– ¿La familia, bien, su hijo y los niños?
– «Todos, todos.»
– ¿Y la pequeña de la casa?
– «También.»
Con un look muy relajado con pantalón negro, bailarinas a juego y jersey de pico en azul marino, la Baronesa Thyssen confirmó que tanto su hijo Borja como su familia se encuentran «muy bien» tras la llegada de India a la familia a finales del pasado año. Muy bien acompañada por todas las autoridades del Museo, Tita se despidió de ellos antes de marcharse con una gran sonrisa en el rostro.
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