Rocío Carrasco ha hablado para sacar su verdad, y poder así resurgir ella. Ha tardado veinte años en hacerlo, y lo hace para seguir viva, tal y como dice el título de la docu-serie. Pero las voces de han vuelto a alzar contra ella, porque con esta liberación por su parte, no ha tenido en cuenta que a quien pone de nuevo en el disparadero es a sus hijos. Según sus propias palabras le “arrancaron lo que más quiero”. Ahora habrá que ver las consecuencias que sus palabras tienen en los jóvenes, Rocío y David Flores. De su hija ha dicho que es influenciable y está manipulada por su padre, de su hijo…que aunque le preocupa, y mucho, no tanto…porque ella sabe que es un chico feliz, y que la ama.