Ni que decir tiene que la monarquía no está pasando por su mejor momento. Los escándalos protagonizados por don Juan Carlos han salpicado también a los demás miembros de su familia, que sufren la caída en desgracia de su reputación por culpa del emérito. A los problemas institucionales se le añaden los de sangre, puesto que los Borbones están más divididos que nunca. Una de las que peor lo está pasando con toda esta situación es la reina Sofía. Quienes la conocen aseguran que está muy afectada por las tensiones que han hecho estragos en Zarzuela, y lo cierto es que su dolor queda reflejado en la última imagen oficial de la griega que se ha hecho pública. Hay cierta preocupación por la emérita, y es que salta a la vista que esta muy desmejorada. ¿Quieres saber qué le pasa y conocer más detalles? Sigue leyendo, te lo contamos todo a continuación.
3Preocupación por la reina Sofía
> Tras varios meses alejada de la agenda pública por cuestiones de seguridad (la emérita forma parte de un grupo de riesgo de sufrir complicaciones derivadas del coronavirus y, a diferencia de sus hijas, todavía no se ha inmunizado con la vacuna. Al menos que se sepa), la reina Sofía ha retomado sus funciones institucionales y ha presidido una reunión del patronato de la escuela de música que lleva su nombre, eso sí, de forma telemática para evitar riesgos innecesarios. Desde Casa Real se difundieron varias fotografías de ese encuentro virtual y fueron muchos los medios que pusieron el foco en el broche que lucía en su americana roja, el mismo que llevó cuando el todavía príncipe Felipe pidió la mano de doña Letizia de forma oficial.
Muchos entendieron este gesto como una muestra de apoyo público a los reyes, pero lo cierto es que hay algo de su aspecto que llama mucha más la atención. A la reina Sofía se le ve cansada, con las bolsas hinchadas, la mirada apagada y el rostro tenso. En las imágenes que publicó Casa Real se hace evidente que está muy desmejorada y que la horrible situación por la que atraviesa Zarzuela ha empezado a hacer mella en su estado anímico. Entre sus seres queridos existe cierta preocupación, pues no sería la primera vez en que los disgustos y el estrés terminan resistiendo la salud.